Asymmetrical Warfare

The pompously so called «fourth generation wars» are the counterinsurgency wars  or guerrilla warfares or irregular wars or armed civil revolts or wars of liberation or organized banditry, which have always existed, coexisting with the conventional variants of warfare.

They are those that the USA has lost or not winned lately: Vietnam, The Lebanon (Marines pacifying disembarkation, then demolished in their barrack by Hezbollah members) and Somalia (the uncontrollable and unforseeable wasp’s nest of «all against all» of the war lords and the Islamic fundamental militias). They are unequal wars (they call them now «asymmetrical warfare») against an enemy of lower technological military level relative to the regular enemy forces, taken root always in the civil own or occupied population, slightly intense militarily and extensive in the space and the time.
With embarrassing frequency, when the North American human or technological «sensors» detect some probable Iraqi rebel activity or from the foreign muhaydines, first they devastate with ordnance the building, the block, the zone. Then they go to wipe out and to do the body count , because they are very scrupulous with their statistics. Sometimes among the rubbles they can find the corpses of an Arabic innocent and numerous family. There is an excessive use of the attrition, which is indiscriminate and perverse when the enemy fuses with the civil ones. There is a disregard of the active, unexpected patrolling, which needs proportionally less material and human means, but more trade knowledge, moral courage, performance freedom and creativity in the low and intermediate cadres and command and in the men.

Guerras Asimétricas

Las guerras pomposamente llamadas de cuarta generación son las guerras contrainsurgencia o guerras de guerrillas o guerras irregulares o rebeliones armadas o guerras de liberación o bandidaje organizado, que siempre han existido, coexistiendo con las variantes convencionales. Son las que los EE.UU. han perdido o no ganado últimamente: Vietnam, El Líbano (desembarco pacificador de marines, luego volados en su cuartel) y Somalia (el avispero incontrolable e imprevisible de «todos contra todos» de los señores de la guerra y las milicias islámicas). Son guerras desiguales (les llaman ahora «asymmetrical warfare») contra un enemigo de más bajo nivel tecnológico militar relativo a las fuerzas regulares enemigas, enraizadas siempre en la población civil propia u ocupada, poco intensas militarmente y extensas en el espacio y el tiempo.

Con embarazosa frecuencia, cuando los «sensores» humanos o tecnológicos norteamericanos detectan alguna probable actividad insurrecta iraquí o de los muhaydines extranjeros, primero arrasan el edificio, la «manzana», la zona. Luego van a limpiar y a hacer el recuento de cadáveres, el «body count», porque son muy escrupulosos con sus estadísticas. A veces entre los escombros se pueden encontrar con los cadáveres de una familia árabe inocente y numerosa. Se abusa de la atrición, que es indiscriminada y perversa cuando el enemigo se funde con los civiles. Se descuida el patrullaje activo, inesperado, que necesita proporcionalmente menos medios materiales y humanos, pero más oficio, coraje moral, libertad de actuación y creatividad en los mandos inferiores e intermedios y en los hombres.

Abu Ayyub al-Masri

Abu Ayyub al-Masri is the «name» of the current coordinator of the semi autonomous groups of Al-Qaida’s foreigner muhaydins in Iraq. Those scarcely are 2 % of the irregular insurgents in Iraq, but they carry out the immense majority of the suicidal assaults.

That one is not a name, but a nickname, which means, «father of Ayyub, the Egyptian». It is very slightly identifying, except in villages and places in the field. And it corresponds with our » Xuan from the Priest» (a possible sacrilegious son), «Carmelina’s son Ricardo» or the most ambiguous yet, «the son of the given birth one».

Abu Ayyub al-Masri

Abu Ayyub al-Masri, de unos 40 años, es el «nombre» del actual coordinador de los grupos semi autónomos de muhaydines extranjeros de Al-Qaida en Irak. Éstos apenas forman menos un 5% de los insurgentes irregulares en Irak, pero realizan la inmensa mayoría de los ataques suicidas allí.

Aquello no es un nombre como tal lo conocemos, sino un apodo, que quiere decir, «padre de Ayyub, alias El Egipcio». Lo cual es muy poco identificador, salvo en aldeas y lugares del campo. Y se corresponde con nuestros «Xuan el del Cura» (un posible hijo sacrílego), «Ricardo el de Carmelina» o el más ambiguo aún, «el hijo de la parida». El por qué de estos nombrecitos tan vagos, reside en la costumbre que tenían los devotos («ansares») musulmanes de los primeros tiempos de la Yijad o conquista de los territorios infieles a partir del siglo VII, de llamarse así. Indicando con ello su origen familiar, de clan y tribal.

Ahora, el 8 de mayo de 2008 Abu Ayyub al-Masri ha sido detenido cerca de Mosul por unidades iraquíes. Los estadounidenses ofrecían por él una recompensa de 5 millones de dólares, que aunque muy devaluados en su capacidad de compra (véase el precio del barril de crudo en compras puntuales, no en los acuerdos a largo plazo de las grandes compañías petrolíferas), siguen siendo un fortunón por esas tierras. Parece ser que la información precisa de uno de sus hombres más cercanos llevó a su captura. Como otros valentones sorprendidos, la operación fue fácil, rápida y sin ninguna violencia. Estaba durmiendo y no opuso la menor resistencia. El individuo ha sido puesto en manos de los Aliados y su identificación es segura, según los últimos despachos.

Este personaje era el jefe de las redes de Al-Qaida en Irak desde junio de 2006, cuando sustituyó a Abu Musad al Zarqaui, recién muerto en un ataque aéreo norteamericano. En 1982 comenzó a actuar en Egipto, integrando la Yihad Islámica, liderada por el médico egipcio Ayman al Zawahiri. Este personaje es actualmente el brazo derecho y primer vocero de Osama Bin Laden, gravemente afectado por una diabetes, a quien va sustituyendo progresivamente en las cuestiones operativas de Al-Qaida. Algo así como un consejero delegado de la red terrorista islamista radical.  

Abu Ayyub al-Masri es llamado también Abu Hamza al Muhair, otro nombrecito de andar por casa. Desde Egipto Abu Hamza pasó a Afganistán, donde entró en contacto con «la red» (Al-Qaida) y Osama bin Laden.

Se cree que será sustituído rápidamente por Abu Omar al-Bagdadí, cuyo nombre ya sonaba últimamente como un importante coordinador de estos grupos suicidas de Al-Qaida. Para quienes Irak es sólo un terreno propicio para sus matanzas indiscriminadas de iraquíes, buscando encender una guerra civil que lleve a la desmembración del país. En efecto, el Estado Islámico de Irak, declarado por al-Qaida, tiene como fines la destrucción del Irak político. Y si los muertos occidentales por al-Qaida se cuentan por miles, los musulmanes asesinados por ella se cuentan por muchas decenas de miles.