Teoría e Historia Militares y Temas de Interés Permanente en los Conflictos y Crisis Modernos. Military Theory and History and Topics of Permanent Interest in the Modern Conflicts and Crisis.
El Ejército Rojo de Obreros y Campesinos resultó victorioso en la Guerra Civil sobre los Ejércitos Blancos Rusos. Estos fueron soportados en mayor o menor medida en ella por las Potencias europeas, los Estados Unidos y el Japón. Ya entonces, el Politburó Soviético puso sus ojos en Europa, con el fin de extender la Revolución Mundial. En esto, las ideas internacionalistas de León Trostky tuvieron un protagonismo decisivo.
Leon Trotsky
Para ello, el general Mikhail Tujachevsky atacaría a la reciente República de Polonia con sus Hordas armadas euroasiáticas. Y ganaría a la República burguesa. Gracias a que los campesinos polacos se sumarían “fervorosos” a la liberación socialista que le brindaban los Ejércitos Rojos.
El ataque imperialista contra Polonia.
Los Rojos llegaron hasta el Frente de Varsovia, intentando desbordarla por el norte.
El General Mikhail Tujachevsky, a la izda., con otros Altos Jefes del Ejército Rojo
Allí, el mariscal Josef Pilsudski, héroe de la Liberación de Polonia en la I Guerra Mundial, recorría sus brigadas y divisiones. Elevando y consolidando Ia moral de combate de sus fuerzas y la identidad de la Nación polaca, frente al Imperialismo ruso comunista.
Y, preparaba con su Estado Mayor y los comandantes de sus grandes unidades una Defensa móvil en profundidad. Contra los ataques frontales y masivos del enemigo.
Desde Kiev, a cerca de 500 km del Frente, Tujachevsky alentaba a las suyas, con el trato de los déspotas a sus hordas, ayudado por los comisarios políticos de ellas. Y dirigía sus operaciones militares sobre los mapas de la situación de la guerra en su Puesto de Mando. Que era actualizada por las informaciones no contrastadas de sus grandes unidades en el Frente.
El Caedes Operacional.
Tujachevski había tensado también sus Líneas Logísticas al máximo. Estaba engolfado, rozando en su imaginación el triunfo a mano.
Aunque comían del pillaje al terreno que pisaban. Necesitaban también, desde su retaguardia lejana, armas, municiones, medicinas, reposición de unidades, ropas, calzados, mulas de carga y los “carros del país” rusos.
Y, como Milagro surgido de la concentración de Errores del atacante y de Parámetros Eficaces del defensor, el atacante se encontró sin suelo amigo. Sin la imprescindible zona de retaguardia operativa. Para descansar, maniobrar, combatir y consolidarse tras las luchas puntuales. Y, tuvo que retroceder miserablemente.
Los soviéticos en armas, que no militares eficaces, retrocedieron hasta las fronteras de la URSS.
Y, el sueño revolucionario de cruzar las llanuras polacas e invadir Alemania. Y liberar a Europa del sistema capitalista o imperialista, éste como culminación del desarrollo capitalista. Se disipó como el humo del tabaco que fumaban las tropas soviéticas.
Situación actual.
Esta idiosincrasia de los militares eslavos del Oeste de los Urales continúa influyendo en las operaciones, necesidades y características anímicas de los militares de la Federación de Rusia.
La disciplina de las tropas en los cuarteles es deplorable. Abundan los tiempos libres, la holgazanería, las charlas inanes o subidas de tono.
El mantenimiento de los equipos pesados es malo. Algún escritor calculó que, por su experiencia militar, la mitad de los tanques en batalla dejarían de funcionar pronto y que les faltarían combustibles y repuestos.
El ejército ruso carece en su estructura esencial de la armazón un cuerpo de suboficiales formados Específicamente para la dirección inmediata de las tropas y la satisfacción de sus necesidades. Que los conozcan tanto como sus madres. Y con una amplia formación militar, empatía y capacidad de mando. Que los soldados, así, los respeten. Y reconozcan que sin ellos y sin obedecerlos, sus posibilidades de supervivencia en el campo de batalla son mucho menores.
Consecuencias para las operaciones inmediatas.
Esto puede ser un obstáculo insalvable para los planes de Putin, que Gerasimov intenta cumplir.
Y que no se supera por la mera Concentración de la Mediocridad de equipos y hombres en los Frentes.
Surge, un tema menor, pero de gran importancia por las desavenencias que crea en Moscú y con las tropas en campaña. Es la presencia creciente del Grupo Wagner como apagafuegos ruso en la guerra de Ucrania.
WAGNER RECLUTA CONVICTOS RUSOS.
En el mismo se encuadran criminales convictos, mercenarios sirios y libios “entre otros elementos de mal vivir” y voluntarios rusos. En general, gozan de sueldos dispares, dependiendo de su experiencia, origen y trayectoria vital; a un convicto se le paga fundamentalmente con la libertad, más o menos adornada con limpieza de antecedentes.
Su jefe es Prigozhin, un plutócrata ruso y paniaguado de Putin. Este hombre está enfrentado con parte de los del Kremlin y con altos jefes militares por la permanencia de su “grupo armado mercenario particular” en las filas rusas en campaña.
La tolerancia implícita de los jefes militares rusos en Ucrania con los hombres del Grupo Wagner, genera un enorme malestar entre los oficiales, suboficiales y soldados allí destacados. Y rebaja enormemente su moral de combate y su “esprit de corps”.
Si Gerasimov viene con poderes plenos de jefe de la campaña y considera los anteriores argumentos, en relación a la motivación y la disposición combativa de sus fuerzas regulares rusas, tiene que recomponer la situación de las fuerzas, en relación con la presencia del Grupo Wagner en las filas rusas.
La Unidad de Acción y la Concentración de los Esfuerzos en la Campaña.
Otro de los problemas capitales que tendrá que resolver Gerasimov es la Integración estratégica y operativa de todos los Frentes activos de las fuerzas rusas en presencia.
Para establecer una “Unidad Superior del Esfuerzo”, estratégica, que sea coordinada, proporcional y sinérgica. Para optimizar en “tiempos eficaces”, según el principio “universal superior del ahorro de medios” y el “principio militar del Objetivo”, la distribución y el empleo coordinado en el tiempo de las capacidades humanas y materiales adjudicadas a los distintos Frentes.
Así, los rusos tienen diversos Frentes con diferentes importancias y presentando distintas oportunidades.
El Frente norte de Kiev está inactivo. Lukashenko es aliado debido de Putin y con sus balandronadas y maniobras provoca incertidumbres en Kiev. Brinda una oportunidad de drenar efectivos ucranianos móviles, para fijar y proteger el Frente de incursiones rápidas rusas posibles.
Aquí bastaría la presencia en Bielorrusia de una “fuerza de tareas” (tasks force) mecanizada de Rusia. Contando con tanques y vehículos de combate y transporte de infantería, con apoyo de artillería, ingenieros, defensa contra aeronaves (DCA) y aviación de apoyo a tierra y su escolta. E integrando un par de divisiones. Que se moviera por el sur de Bielorrusia merodeando.
El Frente de Crimea está activo hacia Jerson, Mariupol y Zaporiya y crea incertidumbre hacia Odesa. Permite la defensa de los 4 territorios anexionados por Putin,
El Frente del Donbass, al sureste de Ucrania, está activo en los oblast o provincias de Lugansk, al norte, junto a la frontera con Rusia, y Donetz, al sur. El Frente del Noreste, hacia Jarkov o Kharkov está en hibernación. Ambos son promisorios en teoría en esta nueva fase de la guerra.
La acción conjunta y coordinada desde ambos Frentes rusos, de “fuerzas de choque de ruptura” de la defensa Táctica ucraniana. Seguidas, tras la irrupción, por “grupos móviles blindados” con apoyo aéreo, avanzando en la retaguardia operativa ucraniana hacia una población o pequeña zona. Formando un amplio y doble movimiento envolvente en torno al enemigo. Puede crear un embolsamiento de éste o, al menos, una grave amenaza de corte de comunicaciones para las fuerzas ucranianas más activas y, por tanto, equipadas con equipos pesados, desplegadas en el este del país. Rusia cuenta con más que suficientes fuerzas móviles regulares para ello.
El Contraataque Ucraniano.
Los ucranianos pueden contraatacar empleando fuerzas blindadas con suficiente punch, como los Main Battle Tanks más modernos. Los tanques “pesados” que Zelensky reclama a los EEUU y a Europa ahora. Los Challengers (con su blindaje Chobham); Leopards 2 A5, de ingeniería alemana; Leclercs, el primer tipo construido de esta nueva generación de tanques y Abrams, los estadounidenses.
Avanzando rápidamente desde la profundidad del despliegue ucraniano, sobre un flanco de las puntas de avance rusas. Recordemos que ese territorio es terreno favorable para los blindados.
Para ello Ucrania necesitará contar con varios batallones de dichos tanques. Distribuidos por sus concentraciones más importantes, cada uno con unos 50 tanques. El distribuirlo o emplearlo por compañías aisladas es desperdiciar su especial y única velocidad de avance todoterreno y potencias de choque y de fuego, protegidas por un blindaje eficaz. Que es completamente decisoria en el combate moderno.
En toda esta filigrana teórica de maniobras y combates, ganará el más capaz, equipado, motivado y preparado.
El desnaturalizado frente aéreo ruso actual.
El objetivo del frente aéreo ruso actual es el debilitamiento de la moral ucraniana. Mediante el ataque sucesivo a las instalaciones civiles (energías, agua y comunicaciones) y a los núcleos urbanos de cierta importancia ucranianos.
Es de señalar que este objetivo bastante criminal no tiene como blancos a las fuerzas militares enemigas, sino a sus poblaciones inermes de la retaguardia. Para más INRI, comenzó a ser usado descaradamente cuando Putin y sus altos capitostes y paniaguados del Kremlin se dieron cuenta de que su “actuación militar especial” en Ucrania era un “bluff”. Y que Ucrania era un hueso duro de roer para las fuerzas rusas empleadas en ella.
MAESTRO SUN
Hace casi 2500 años, el Maestro Sun (Sun Tzu), en la Época de los Reinos Combatientes, ya avisó que “cuando el general ya es nombrado por el soberano, éste no se debe meter en sus asuntos” y “cuando los cortesanos y ministros interfieren en su mando, traen la desgracia al Reino”.
Además, este objetivo ya ha sido utilizado en otros casos y con nula eficacia, por cierto.
El Japón fue bombardeado inmisericordiemente por los EEUU, cuando ya había conseguido ocupar las islas japonesas (p.e., Okinawa) suficientemente cerca del Japón insular. Los japoneses ya preparaban a su población civil para una resistencia numantina al invasor. Creando una inmensa fortaleza natural en sus islas, donde cada una era un reducto fortificado de ella.
Fueron las dos bombas atómicas de Hiroshima y Nagasaki, que supusieron un “ascenso a los límites superiores”, en la lucha contra las retaguardias civiles. Porque eran mucho más que un cañonazo muy grande. Las que obligaron al Japón a rendirse incondicionalmente a los estadounidenses. Porque amenazaron (aunque no tuvieran más artefactos en ese momento), con destruir la esencia e identidad nacional japonesa.
En general, el uso del “bombardeo indiscriminado de las retaguardias civiles”, lo que consigue es galvanizar a éstas en torno a su gobierno y a sus fuerzas armadas. Porque perciben del enemigo un odio demoníaco, feroz hacia ellas, que buscaría la destrucción de su identidad, cultura e idiosincrasia.
Modernamente empleó ese tipo bombardeo los EEUU en Vietnam de Norte. Ellos abandonaron en 1973 el Vietnam del Sur y en 1975 lo ocuparon, casi sin resistencias, las fuerzas comunistas.
El Apoyo Aéreo de Rusia a sus Fuerzas Terrestres.
El frente aéreo ruso en Ucrania debe ser dirigido contra las concentraciones de tropas enemigas (reservas, preparaciones para el ataque, fuerzas en marcha), sus comunicaciones terrestres y la red logística, los puestos de mando y centros de comunicaciones, las puntas de ataque de sus fuerzas, las posiciones de artillería y de lanzamiento de cohetes y drones.
Con todas las derrotas acumuladas padecidas por el Ejército de la Federación rusa en su “operación militar especial” en Ucrania desde el 24 de febrero de 2022 hasta ahora, Vladimiro Putin no descansa, se irrita y no tiene paz.
Su último “as en la manga” es el general de ejércitoValery Gerasimov, nacido en la ciudad rusa de Kazan, hace 67 años y jefe del Estado Mayor General desde 2012.
Una edad casi ideal para el trabajo que se le viene encima. Definido por organización, cambios estructurales, disciplina, flujo suficiente de medios y mano dura.
Casi como lo tuvo el mariscal de la URSSGeorgi Zhukov, Cuando acudía a los lugares de batalla importantes para presidir, en nombre de la STAVKA, el Estado Mayor General del Ejército Rojo de Obreros y Campesinos, las principales ofensivas de sus Grupos de Frentes contra los alemanes, Un Frente era el equivalente occidental al Grupo de Ejércitos, aunque los ejércitos rojos eran más pequeños en hombres y medios que los occidentales.
MARISCAL DE LA UNIÓN SOVIÉTICA GEORGI ZHUKOV, CON TODAS SUS CONDECORACIONES.
Cuando en las fotos aparece Putin con sus jefes militares superiores, su ministro de Defensa Shoigu está a su derecha y Gerasimov, el jefe del Estado Mayor de todas las Fuerzas Armadas, está a su izquierda.
Como Adjuntos en su Puesto de Mando Principal, probablemente en Crimea, Gerasimov tendrá al Jefe de las Fuerzas de Tierra de la Federación Rusa, a las que pertenecen la inmensa mayoría de las tropas en presencia en ese teatro de operaciones, y al actual segundo jefe de su Estado Mayor General (su G-1, en nuestra nomenclatura).
En un principio se habló de que el nombramiento de Gerasimov era una maniobra de los altos jefes militares rusos. Para ver cómo se desempeñaba en campaña un general intelectual, un teórico de la guerra híbrida moderna. Pero, no es cierto que no tenga experiencia de combate. La tiene suficiente.
Gerasimov ya participó en su día en las dos “guerras antibandidaje” o contrainsurgencia (denominación rusa) de Chechenia. Que luchaba duramente por su independencia de Rusia, como heredera de la URSS, la antigua opresora imperialista. En la segunda, en 1999, fue el segundo jefe de las fuerzas armadas rusas en la campaña. Está acusado de crímenes de guerra contra poblaciones chechenas por su actuación directa.
También actuó, ya como jefe del Estado Mayor General de las fuerzas rusas, durante la campaña de Rusia de apoyo directo al régimen sirio de Bashar al-Assad, desde 2015. Haciendo frecuentes viajes al teatro de operaciones sirio.
A partir de sus experiencias directas y de su capacidad de análisis y síntesis de los temas de su profesión, Valery Gerasimov desarrolló su Teoría de Doctrina militar, vigente hoy en día en Rusia. Es su Teoría de la Guerra Híbrida.
Aunque no es más que una Recopilación de políticas diplomáticas, exteriores heterodoxas, económicas y de acciones militares y sus tendencias. En definitiva, lo que preconiza Gerasimov es utilizar contra el enemigo todos los medios de un Estado modernos en una gran acción dentrípeta y sinérgica: diplomáticos, exteriores heterodoxos (apoyo diverso a disidencias internas enemigas, incluso armada, boicots, fomento del descontento popular), económicos, militares.
Así las cosas, Putin decidió con su cúpula militar sustituir al “carnicero de Siria” coronel general Surovikin, como jefe militar de la campaña ucraniana, nombrado apenas hace unos meses. Era la cuarta sustitución del jefe de campaña ruso en Ucrania.
El general de ideas y métodos de mano dura e intransigente y órdenes centralizadas, que se daban de arriba a bajo, por un general de formación e ideas más flexibles y frescas.
Que adaptara el anquilosado y pesado funcionamiento del Ejército ruso a una guerra de IV (guerrillas) y V (híbrida) generaciones.
Luchando contra un enemigo muy bien equipado (con equipos y materiales mejores que los suyos, para una guerra convencional, en general), comprometido y decidido en su lucha, con oficiales y cuadros muy capacitados, tremendamente motivado.
Y, aleccionado, entrenado y mentalizado para una guerra moderna, tanto de “movimiento operativo y combate” como de “guerrillas y contraguerrillas”.
Algunos Problemas para Gerasimov.
Muchos son los problemas acumulados por el Ejército de la Federación Rusa y no todos son resolubles en el corto plazo. Probablemente por ser ya estructurales.
La Logística militar continua, eficaz y suficiente.
Uno de los problemas estrella, chirriante, de los militares rusos es establecer una logística militar integral moderna y efectiva. Incluso, definirla es bastante sencillo para un profesional.
ADOCTRINAMIENTO EN UNA COOPERATIVA AGRÍCOLA SOVIÉTICA.
Pero, en la URSS y ahora en la Federación Rusa, no han podido o sabido hacerlo bien.
En la URSS fue un clásico que las patatas recogidas en un koljoz o sovjoz se pudrieran en el campo. Mientras, a unas decenas de km el pueblo urbano padecía hambre o una industria de fabricación de alcohol cercana tampoco las recibía para producirlo, a partir del almidón de las patatas.
Probablemente, el error seminal venga de las doctrinas económicas marxistas leninistas, alejadas de la realidad hasta en la teoría. En este caso, la económica.
Donde la logística no se considera, ni se le atribuye “valor añadido” en la economía. Por lo tanto, en los presupuestos y los teóricos Planes Quinquenales soviéticos no se la tenía en cuenta.
El “valor total” de un bien viene del “trabajo de los obreros” y, luego también, de los campesinos. Y, amén.
Como todo el valor del bien se le atribuye a los productores, la diferencia entre el precio de venta y el coste de producción de los obreros, la famosa plusvalía, se acusa que se la Apropia (la Roban) los cochinos capitalistas.
Esto es una falacia teórica más del comunismo, con desastrosas consecuencias económicas y militares para el país.
Aunque el comunismo ya haya desaparecido de Rusia como fuerza gobernante teórica, muchos de sus estilos, ideas y métodos, aplicados durante 70 años, han calado y perdurado en la idiosincrasia de la sociedad y su cultura.
No es éste, evidentemente, un Tratado sobre los Parámetros determinantes de la Eficacia militar. Tampoco es un Estudio sobre los Principios o los Sistemas Operativos de la Guerra. Sobre los cuales tienen a su disposición suficientes artículos en esta Página Web, que consultan ahora.
Se trata de realizar una breve explicación de las características de esos Parámetros determinantes. Que deben funcionar siempre en Armonía y Cohesionados.
Para que, con esta descripción en la mano, puedan definir y conocer fácilmente los Fallos y Errores que cometen las Unidades en su Oficio más peligroso: la Guerra.
Doctrina y Reglamentos.
Los Parámetros determinantes deben definir y transmitir el Qué y el Cómo de las unidades y medios en la guerra contra los variados enemigos posibles.
O sea, supone tener unos buenos Principios de su Arte-Ciencia de la Guerra y unos Sistemas Operativos adecuados a la guerra moderna, híbrida y cibernética.
Y, deben hacerlo de una manera amplia, clara, creativa, estimulante, flexible, participativa y resolutiva.
Los Parámetros Determinantes y su medio de expresión cabal.
Esos Parámetros Determinantes se conciben y materializan por el Elemento Humano de las Armas y la Guerra. Sin éste, serían sólo unas hojas más o menos numerosas de grafías. A la espera de obtener su sentido, siempre eminentemente práctico, su expresión cabal y su utilidad trascendente. Que consiguen por su empleo por los militares.
Cadena Logística.
Organiza y distribuye los medios a las unidades. También podría participar en su adquisición externa en el mercado, en todo o en parte. Incluye generalmente los servicios sanitarios.
Debe ser cercana, con medios diversos: los transportes de larga y de reparto, los almacenes o centros o nodos y cocinas en varios niveles de actuación y el control y los medios informáticos. Tiene que ser informada, previsora, proactiva, organizada y suficiente.
La Trilogía Ejecutora.
Unidades de las armas y servicios.
Que puedan integrar conjuntos tácticos y operativos de Armas Combinadas. Que estarán compenetrados, entrenados, también conjuntamente, que aporten un apoyo mutuo y una sinergia de efectos y que se tengan mutuo respeto.
Jefes. Oficiales.
Deben ser dispuestos, empáticos, formados, motivados, resolutivos, respetados, responsables y sufridos.
Cuerpo de Suboficiales.
Deben ser cercanos, entrenados, específicos de sus tareas, capaces, formados, leales a los jefes, a los soldados y a las unidades y respetados y altamente considerados por las tropas.
La Conquista por los Mongoles entre 1219 y 1220 del Imperio Islámico de Kharizm (o Khuarezm), en el Turkestán, nos servirá de modelo para presentar sus características operativas y tácticas. La rápida derrota de los musulmanes a manos de Gengis Kan y sus hombres es un ejemplo del empleo sinérgico de la capacidad de movimiento operativo y de la capacidad de combate de un sistema militar altamente eficiente.
Roces entre vecinos.
El imperio de Kharizm era muy reciente. Mientras Gengis Kan conquistaba el Asia Central, hasta llegar a sus fronteras, el Sha Mohamed II extendía sus dominios hacia el sur y el este. Había heredado el territorio del Irán moderno (Persia), pero le había añadido Afganistán, casi hasta el río Indo, y había alcanzado el Sir Daria, ocupando toda la Transoxiana.
Gran Estatua Ecuestre de Gengis Kan cerca de Dadal, su lugar de nacimiento, Mongolia
Todo el enfrentamiento entre ambos imperios comenzó cuando Inalchik, el gobernador de la ciudad de Otrar, en el río Sir Daria, a unos 200 Km. del mar de Aral, detuvo una caravana de mercaderes patrocinados por el Gran Kan y ejecutó a sus jefes, acusándoles de espías. Y posiblemente tuviera razón, pero eso era muy poco diplomático y dañaba un tema muy sensible en las costumbres usuales entre estados y jerarcas. Gengis Kan envió ante el Sha una embajada, formada por un kharizmí y 2 mongoles, solicitándole un castigo para Inalchik. Mohamed ejecutó al kharizmí y devolvió los 2 mongoles a Gengis, con la cabeza totalmente rapada, un insulto personal grave para esos guerreros. La guerra era ya inevitable.
Preparativos de las fuerzas.
Gengis Kan preparó a su ejército para una marcha de más de 1.500 Km., desde sus montañas de Tien San a las fronteras de Transoxiana.
El ejército mongol de la época sumaba algo más de 100 mil hombres. Su unidad táctico-operativa básica era el tumán o división, con unos 10 mil hombres, dividido en 10 minganes o regimientos. El gran ejército se dividía en tres partes: el ejército de la izquierda o del este, el de la derecha o del oeste y el del centro. Los dos primeros tenían un número muy variable de hombres, en función de las necesidades operativas y tácticas; por ejemplo, uno podía tener doble número de hombres que otro. El ejército del centro era mucho más reducido y estaba formado por unidades de élite y por las guardias del Kan y de los distintos príncipes mongoles; en ellos su unidad básica era el mingan. Un cuerpo de ejército mongol constaba de uno o dos tumanes.
Mohamed II reunió un gran ejército, bien armado y equipado, que totalizaba entre 200 y 300 mil hombres (algunos autores hablan hasta de 400 mil hombres, a todas luces exagerando), para defender su imperio de la esperada invasión mongola por el este. Muchos de sus hombres eran también jinetes de las estepas, del Turquestán, que estaban equipados y que luchaban de una forma similar a los mongoles. El Sha estaba seguro de que sus soldados podrían detener y rechazar al invasor.
Para ello desplegó a la mayoría de las tropas a lo largo del Sir Daria, su gran barrera natural al este, y estableció una línea de comunicaciones fortificada desde el despliegue de su ejército hasta su capital, en Samarcanda. Por último, al norte del imperio y protegiéndolo, entre el mar Aral y el Sir Daria se extendía el formidable obstáculo natural del desierto de Kizil Kum, en la depresión Turania, duro y seco donde los haya.
Así, tranquilo con un buen plan, esperó defensivamente a poder derrotar a los mongoles en una gran batalla, por la pura fuerza numérica de su ejército. Pero, fue von Moltke, el viejo, jefe del EE.MM. alemán a finales del siglo XIX, el que dijo que “los planes solían durar hasta el primer contacto con el enemigo”.
Desarrollo de las operaciones.
Durante la primavera y el verano de 1219 un cuerpo de ejército mongol a las órdenes de Jochi, el mayor de los hijos de Gengis, se dedicó a asolar el territorio al oeste del gran lago Baljash, junto a Otrar, dejando un paisaje tan arrasado que era incapaz de soportar a un ejército sin abastecimientos propios.
Jebe Noyan
Según el plan de campaña elaborado por el orlok o lugarteniente del Kan, Subidai Bahadur, un cuerpo de ejército mongol se dirigió a primeros de 1220 hacia el valle del río Fergana, al sur del Sir Daria, en el flanco expuesto del despliegue turcomano, para efectuar un reconocimiento en fuerza.
Iba al mando de Jebe Noyan, uno de los mejores orloks del Kan. Parte de las fuerzas turcas, al mando de Mohamed y del príncipe Jalal-ad-Din avanzaron lentamente hacia el este, sobre el valle. Cuando las vanguardias se encontraron, Mohamed superaba ampliamente a los mongoles y ordenó formar para el combate. Cogidos en terreno estrecho, que no favorecía a su fuerza de caballería, Jebe decidió atacar igualmente. Los mongoles cargaron ferozmente contra los turcos, causándoles muchas bajas. Éstos contraatacaron, intentando envolverles y casi lo consiguen. Pero los mongoles lograron romper el contacto y se escaparon hacia el este.
Las operaciones más decisivas para la decisión de la campaña.
En febrero de 1220, los 3 ejércitos mongoles, al mando de Gengis, de Jochi y de Ogedei y Chagatai, otros dos de sus hijos, cruzaron la zona asolada previamente por Jochi y convergieron sorpresivamente en Otrar, en el flanco izquierdo de la línea defensiva del Sir Daria. Tras el asalto a la ciudad, los mongoles capturaron al gobernador Inalchik y lo ejecutaron muy cruelmente.
Los dos ejércitos mandados por Jochi y por los otros 2 hijos se dirigieron entonces al sur, siguiendo el Sir Daria, y comenzaron a hostigar durante su marcha las posiciones fortificadas de los turcos, a lo largo de su gran línea defensiva planeada. Simultáneamente el cuerpo de ejército del orlok Jebe Noyan, giraba al norte, tomaba la ciudad de Kokand, en el alto Sir Daria, y se dirigía al encuentro de los 2 ejércitos mongoles.
Todas estas operaciones ofensivas contribuyeron a fijar la atención de Mohamed en su línea defensiva fortificada del Sir Daria. En el sur, había ganado la batalla y repelido al invasor y en el norte, aunque los mongoles habían tomado Otrar, no habían penetrado en la Transoxiana. El ejército turco mantenía su alarde de invencibilidad. Mohamed acercó todas sus reservas operativas al Sir Daria. Sin embargo, aunque en ambos casos los mongoles habían sufrido muchas bajas, su proporción con ellos era muy preocupante para los turcos.
Por su parte, tras la toma de Otrar, el ejército al mando de Gengis Kan, con Subidai como su jefe de estado mayor, e integrado por 4 tumanes, se dirigió hacia el norte. Allí tomó la ciudad turcomana de Zarnuk, con el único propósito de capturar a un hombre que, según le indicaron sus informantes, conocía un camino practicable a través del Kizyl Kum, siguiendo una cadena de oasis.
Entonces, los mongoles asestaron su golpe decisivo.
La oportunidad surge del juego de actuaciones dialécticas entre las unidades enfrentadas. La oportunidad es la debilidad táctica e incluso operativa, que aflora en un sector enemigo o está a punto de hacerlo. Sobre ella podemos actuar e incluso precipitarla con nuestro sistema de armas combinadas en una “interfase de acción” especialmente favorable a nosotros. En la oportunidad subyace siempre un error enemigo. Si éste resultase insuperable para él, sería por las circunstancias imprevistas, sorpresivas que concurrieran. Las oportunidades son una característica útil y ventajosa aportada por la dialéctica de acciones en el caos de la guerra.
Los objetivos intermedios previstos en los planes no son oportunidades. Son previsiones derivadas de la planificación y de la resolución fundada del mando. Cuando comienzan los contactos con el enemigo, su logro comienza a ponerse a prueba, como decía Moltke, en el juego de la dialéctica.
Funcionamiento.
De este juego en un medio caótico, independientemente de las desviaciones mayores o menores que sufran los planes, surgirán las oportunidades y los peligros. Los peligros serían las oportunidades del enemigo sobre nosotros. Ambos son imprevistos, pero asequibles y explotables durante cierto tiempo. La razón de la imprevisibilidad en el tiempo de las oportunidades está en el número cuasi infinito de variables y de acciones individuales y colectivas que concurren a definir una “situación” y los ciclos de acción sucesivos en los que ella se va desarrollando.
La oportunidad surge en un fallo del enemigo en el empeño de sus fuerzas y medios de apoyo. Puede originarse por la diferencia de calidades entre las distintas fuerzas enemigas y en la transitabilidad o buen «on going» de un sector dado, que debilitan una defensa o el impulso de un ataque. Aparece también en el descuido del enemigo en presentar un flanco expuesto, es decir, una interfase de acción favorable real o potencial con nosotros, no debidamente cuidada por él para enfrentarse a nuestro sistema interarmas disponible. La oportunidad está en un vacío de capacidad de combate, que surge en un ciclo de acción en una unidad, en un sector del combate. Que queda desprotegido y que es desatendido durante un tiempo suficiente, que permita su detección y su explotación por el contrario.
Es necesario aprovecharla rápidamente. La propia dinámica del proceso de interactuación en el medio caótico, la oculta, la esfuma, la hace inalcanzable, tras un corto tiempo. Ello es debido a la sucesión de los ciclos de acción que modifican las circunstancias que concurren.
Desarrollo.
Para detectar las oportunidades al nivel de actividad militar que sea, es necesario la inteligencia (exploración elaborada y convertida en conocimiento útil, continuo, suficiente) y la presencia suficiente del jefe correspondiente. Para aprovecharlas es necesario una comunicación vertical simple y sencilla, apoyada por la comunicación implícita entre los jefes subalternos y movilidad, flexibilidad y capacidad de combate disponible en las unidades y mandos implicados. Si la oportunidad es trascendente, se traslada a ella por el mando el centro de gravedad táctico u operativo. Si es importante, su aprovechamiento debe contribuir concéntricamente a la creación y al desarrollo de aquél.
Las mismas características recién citadas, pero enfocadas a nosotros mismos, son las que, a su vez, nos protegerán de los peligros u oportunidades enemigas. Con ello se conseguirá evitar su aparición, compensar el peligro o mitigar su presencia y disminuir nuestro tiempo de vulnerabilidad. Si a pesar de la previsión y el cuidado, concurren en su aparición circunstancias sorpresivas o inesperadas, incluso por fallo de nuestra parte, los medios a emplear son las dos últimas acciones citadas para su detección y aprovechamiento.
¿Cuál es esa presencia suficiente del jefe? Aquélla que le permita aprovechar las oportunidades que surjan en su nivel de actividad. Todo ello está relacionado directamente con los dos estilos o formas de mando diferentes para el cumplimiento de las tareas de los distintos escalones de mando.
El mando táctico debe ejercerse Sintiendo la “interfase de acción” con el enemigo, el intercambio de acciones con él en el terreno. El límite del mando táctico está claramente en la brigada. Y, en grandes operaciones o en el ataque o en el arma blindada, probablemente alcance en mayor o menor grado a la división, cuyo jefe debe impulsar la marcha o el ataque detrás de la primera agrupación importante del grueso de la unidad.
El mando de los cuerpos de ejército es claramente un órgano de gestión operativa y debe tener una perspectiva más amplia del conjunto. Así como también un mayor alejamiento del contacto directo con el enemigo, que supere la interfase y su retaguardia inmediata. Esto le brida al mando amplitud, visión, serenidad y seguridad.
En el inmenso caos que se va creando en un combate, la previsión del mando puede imponer y perfilar su evolución en una dirección y sentido.
Al igual que el mando efectivo es capaz de “captar” y “sentir” los signos de debilidad y desánimo del enemigo. Y prepara entonces las fuerzas que usará en la persecución y los apoyo que les dará. Poniéndolos bajo el mando de un jefe enérgico, animoso, líder y lúcido.
El comandante debe ir preparando “fuerzas de disposición rápida” en las unidades a su mando. Por ejemplo, una compañía mixta en el batallón; un batallón de armas combinadas en la brigada. De tal manera que la aparición de la oportunidad, cercana y sorpresiva, le permita aprovecharse de ella. Ya que la sorpresa ayudará a que la oportunidad sea aprovechada al principio por una fuerza propia relativamente pequeña. Y que podrá ser reforzada pronto por parte del grueso.
Ejemplo de la presencia eficaz, no física, de un Alto Mando.
Erich von Manstein dirigió desde sus cuarteles en Zaporiya, Ucrania, la operación de contrataque del grupo de ejércitos Don, principalmente contra el Frente del Suroeste soviético del general Vatutin. Para mediados de marzo de 1943, los alemanes habían eliminado del orden de batalla de Vatutin a 6 cuerpos de tanques, recuperaban Kharkov y tenían un frente defensivo resistente desde Tangarov a Belgorod, apoyado en el Mius y el Donetz. También contaban en el sur de Rusia con reservas móviles suficientes para rechazar posibles rupturas operativas en la zona. Y, tras el descalabro de Stalingrado, habían recuperado la iniciativa estratégica, al menos en el teatro de operaciones sur.
HITLER, PREOCUPADO, VISITA AL MARISCAL VON MANSTEIN IN ZAPORIYA.
Un ataque contra el saliente de Kursk, terminado de perfilar por el avance de von Manstein sobre Belgorod, que se hubiese iniciado en el mes de abril, tenía entonces posibilidades de éxito por la falta de preparación soviética.
Este mismo ataque iniciado en julio de 1943 determinó que ya no tuviesen importancia más errores del alto mando alemán (Hitler): entonces, el tema de estrategia total o estrategia de estado no era ya quién ganaría la guerra, sino cuánto tardaría en hacerlo.
Fallo en la presencia eficaz del mando.
Veamos un ejemplo de una presencia inadecuada del jefe, en relación con el escalón que se supone que manda. Lo protagonizó Rommel en el norte de África en noviembre de 1941.
PUESTO AVANZADO DE MANDO DE ROMMEL EN EL DESIERTO.
Creyendo erróneamente que los blindados ingleses estaban dispersos tras algunos combates, Rommel ordenó concentrar los suyos en la frontera libio egipcia. Dedicado directamente a ello, como un jefe de regimiento más, se vio envuelto en el rechazo de un ataque británico. Incluso estuvo aislado con su vehículo de mando, por un problema mecánico, durante medio día en el frente.
Esto le privó temporalmente del control de las operaciones en Tobruk. Su toma era su principal objetivo operativo y resistir al asedio alemán era el de los ingleses. Debido a esta distracción injustificada, Rommel tuvo que abandonar el intento de tomar aquel puerto fortificado, situado en su retaguardia operativa, la cual hubiera podido consolidar para su defensa de su territorio ganado.
En menos de un mes, los avances de los tanques y la infantería ingleses forzaron a Rommel una larga retirada hacia Túnez. Tuvo que ceder casi todo el terreno que había ganado desde el mes de marzo, cuando su llegada a África, hasta que logró reponerse y pudo contraatacar, al aliviarse la presión británica.
Generales rusos extraviados de su Puesto de Combate Avanzado en Ucrania.
Introducción.
Hay cientos de videos ucranianos neutralizando a vehículos aéreos, navales y terrestres rusos. Que más que combatiendo a las distancias cercanas y próximas, parece que posan como en el tiro a los patos en una feria de pueblo.
Estos
videos están producidos en su gran mayoría por casi desconocidas
empresas cinematográficas.
Y,
a veces, incluso, cae casi en primera fila un supuesto general ruso.
Desarrollo.
Un
general jamás acompaña o se sitúa en
combate junto
a un teniente de pelotón o un capitán de compañía o un comandante
o teniente coronel de batallón.
Sus tareas no son pegar tiros. Ni arengar a los hombres que le rodean. O impulsarles al combate con su ejemplo. Eso lo hacen los oficiales a cargo de las unidades y los suboficiales al mando inmediato de los soldados. Que conocen como nadie a sus soldados. ¿O no será así aquí?
La
tarea del oficial general es concebir y conceptualizar
el combate y las maniobras de sus unidades tácticas,
cumpliendo las Tareas y Misiones del ejército en
campaña.
Y, facilitar los medios en: unidades de armas combinadas; los apoyos antitanques, artilleros y aéreos a las mismas y la logística para ello: desde la sanidad a los abastecimientos de todas clases, desde combustibles a municiones, pasando por equipos de mantenimiento y de retirada de vehículos averiados y las cocinas y la distribución de alimento a los puntos de recogida de las unidades.
Él arenga e impulsa a los mandos y jefes de unidades dependientes de él. Y, a los soldados todos en ocasiones contadas.
Para cumplir Aquéllas, cumpliendo el Principio Universal de la economía de medios humanos y materiales. O sea, siguiendo su mejor y más optimizado empleo.
Y, como ya he dicho en otra oportunidad, la muerte de un general es un desastre nacional. Y, la muerte de un general de 4 estrellas, comandante en jefe de un ejército de muchas decenas de miles de soldados, es una catástrofe nacional.
Simplemente, porque son unos activos militares y muy importantes.
Buques porta cohetes (missiles), tipo corbeta, fragata, destructor, crucero ligero, de la Flota rusa del Mar Negro, hundidos desde tierra por cohetes dirigidos ucranianos.
Buque insignia Flota del Mar Negro «Mosvka«, hundido principio guerra.
Grupos de tanques rusos, entremezclados con vehículos logísticos de combustible o municiones y con vehículos de combate de infantería, ¿dónde está el encolumnamiento de marcha o el despliegue de ataque o su seguridad ante el enemigo?, que merodean por la zona de combate de modo errático e inconexo.
Tanque ruso T-90.
Y
que son destruidos por los ucranianos, empleando lanzacohetes
antitanques personales y artillería con dirección de tiro muy
moderna, de fabricación estadounidense o europea. Son especialmente
buenos los cañones alemanes autopropulsados de 155 mm. Toda la
dirección de tiro es automática y los ucranianos no se
acostumbraban bien.
Aviones y helicópteros rusos son derribados por posiciones antiaéreas en tierra, fijas o móviles, inclusive de manejo personal, ucranianas.
Caza Ruso Sukhoi SU-57, no enviado a Ucrania.
Putin amenaza
continuamente a sus potenciales enemigos, resumiendo, el Occidente
liberal, con cohetes balísticos intercontinentales de
velocidades hipersónicas y portadores cada uno de
varias cabezas de combate. Que se separan en la última
fase de vuelo hacia la zona objetivo, del cohete portador.
Son los MIRV o multiple independent reentry vehicles. O cohetes de múltiples vehículos (o vectores) independientes de reentrada (a la atmósfera).
Con
todo el escacharrante e ineficaz “potencial defensivo destructivo”
(PDD) de sus armas de tecnología ultramoderna
y resultados
paupérrimos. ¿Por
qué Putin no
establece un ejército moderno, eficaz, Motivado y más pequeño? A
ejemplo del israelí y de dimensiones acordes a las propias
necesidades de Rusia.
Y,
abandona sus escalones
y sus puntas de avance y ataque
masivas. Donde su despliegue se estorba a sí mismo. Para moverse y
para atacar o retroceder con agilidad, precisión y efectividad.
Resultados.
Según
un resumen de medios
periodísticos
extranjeros prestigiosos
(The
Economist, Forbes, The Washington Post)
y del periódico El Mundo, las Bajas
Confirmadas
en este conflicto hacia
el
24 de agosto
serían:
Tanques
Ucranianos
240
Rusos
967
Aeronaves
Ucranianas
74
Rusas
213
Buques de diversos tipos
Ucranianas
19
Rusas
11
Ese
número de
tanques rusos serían el equipamiento de cuatro divisiones de tanques
o cinco o seis divisiones mecanizadas o motorizadas, según
nomenclatura, con su orden de batalla al completo. Otrosí, en su
guerra de Afganistán
la URSS
perdió 147 tanques. Y, además, los
tanques rusos
perdidos
hasta ahora es una cifra superior a los tanques en activo de
Alemania,
Francia y ReinoUnido,
juntas.
Si
Rusia
no puede con Ucrania,
mucho más débil militarmente, ¿cómo se va a enfrentar con una
cierta probabilidad de éxito con los EEUU
o el Reino Unido o Francia?
Antecedentes promisorios.
Mijail Tujachevski
Rusia, antes la URSS, era en los años 22 a 37 del siglo pasado, una potencia avanzada en filosofía o “teoría moderna del arte y la ciencia” militar. Allí brillaron con luz propia el Mariscal Mijail Tujachevski, el Teniente General Vladimir R. Triandafillov y el Brigadier Georgy S. Isserson… con sus equipos de auxiliares y colaboradores. Todos estudiosos y adelantados de la teoría de la Maniobra Profunda en la retaguardia táctica, operativa y, aún, estratégica enemigas, de los ejércitos modernos.
Georgy S. Isserson
Que
yo considero que estaba más sólidamente
razonada y argumentada que la teoría de la guerra mecanizada
alemana. Que era más bien “práctica”.
Alemania,
con unos mandos y oficiales excelentes, cuadros (sin par en el mundo)
y soldados, de lo mejor del mundo; y, de momento, en 1939, todos muy
entrenados y motivados.
Por cierto, le llaman Blitzkrieg o guerra relámpago a la forma de lucha alemana. Nombre dado por un periodista. Y la gente se cree que es por la rapidez de sus maniobras.
Vladimir R. Triandafillov
Pero, los especialistas le llamaban guerra relámpago, por los continuos cambios de dirección de los movimientos tácticos de las fuerzas principales. Siguiendo los puntos o posiciones más débiles o menos protegidos del enemigo. Cambios que trazaban los recorridos del rayo en la superficie del área de combate.
Sólo
Triandafillov
murió en paz y reconocido, en el año 1931. Isserson
estuvo en la cárcel cuando la Gran Purga y no se le reconocieron sus
méritos o aportaciones. Tujachevsky
fue fusilado en la gran purga de 1937 del Ejército Rojo de Obreros y
Campesinos. Para eliminar los cuadros militares que podrían
hacer sombra al poder del Partido, la excusa (o a Stalin).
Esto esterilizó la creatividad y la frescura de los mandos militares sobrevivientes. Aumentó la vigilancia y la delación entre los iguales. Las ideas y los conceptos militares de los depurados adquirían su infamia y vituperio; esto resultó fatal para la URSS y sus militares a 4 años de una invasión exterior. Los jefes y oficiales sólo se preocupaban de cumplir las órdenes sin errores; para no ser víctimas de depuraciones o ceses o traslados; lo cual lleva en la guerra a no hacer nada eficaz, contundente o decisivo.
Y llevó a asumir por el Ejército las viejas doctrinas de la Guerra Civil rusa contra los ejércitos blancos. Cuando la mecanización de las fuerzas era aún un desideratum, la logística roja usaba para sobrevivir el despojo del territorio hollado, aunque fuera propio, el mando único del jefe militar era compartido con el comisario político en la unidad y los ejércitos rojos eran hordas.
Y,
así enfrentó la URSS,
sin altos mandos, oficiales y suboficiales formados y sin doctrina
adecuada, la invasión alemana del 22 de junio de 1941.
¿Estamos ahora en una Etapa o Fase de Decadencia parecida en el Ejército ruso de Putin, que cuenta con más de un millón de personas armadas enroladas?
El centro de gravedad de la campaña militar de los rusos se traslada entonces a Mariupol. Si logran tomarla, casi toda la costa sur de Ucrania, desde el oblast de Lugansk hasta la península de Crimea, ya ocupada en 2014, quedaría en manos de los invasores. Con ello consolidarían ya bajo su dominio, las Repúblicas Populares de Donetz y Lugansk, en manos actualmente de los prorrusos ucranianos del este.
Al igual que en Stalingrado, en Mariupol sólo resisten ahora las edificaciones industriales de estructuras de acero y hierro, cubiertas con varias capas de planchas metálicas. Se dice que hasta un 90% de la ciudad ha sido ya destruida. Y que en ella continúan viviendo en penosas condiciones unas 120 mil personas, civiles en su inmensa mayoría.
La acería Azovstal está formada por un conjunto de edificaciones industriales, como hornos altos, convertidores de aceros de diferentes aleaciones y contenido en carbón, tolvas de materias primas, tuberías sin fin por todos los lados, vías interiores de ferrocarril, muelles de carga, almacenes de todo tipo, oficinas administrativas. Que se extienden por una gigantesca planta industrial de 11 km2. Gran parte de las instalaciones preexistentes han sido arrasadas ya por el fuego pesado de los rusos, efectuado desde distancias seguras para ellos.
Acería Azovstal
Pero, además, por debajo de la misma, en el subsuelo, se despliega una red de túneles que han sido incorporados a su defensas, con los accesos correspondientes. Desde 2014, tras la toma de Crimea y la rebelión de los prorrusos del Donbass, han sido varios los intentos de los prorrusos por ocupar Mariupol. Esto llevó a adecuar y perfeccionar ese entramado de túneles para la defensa en los sucesivos años.
El Sistema de Túneles Defensivos y de Protección de Azovstal.
El origen de los túneles data de la época de la Guerra Fría y tuvo como objetivo servir de refugio nuclear para los 40 mil empleados y obreros de la inmensa siderúrgica. Que era un probable objetivo para los EEUU.
De los túneles actuales salen también ramales que llevan a ensanchamientos. Que sirven de áreas de concentración y descanso, depósitos de agua y alimentos y armas y municiones y escondrijos de civiles. Y puntos de apoyo de la propia red de túneles.
Su objetivo era permitir segura y subrepticiamente el traslado de los defensores desde una instalación a otra. Para optimizar sus acciones de rechazo, preferentemente sorpresivas; concentrar y retirar fuerzas a/o desde un punto de apoyo de la defensa; abastecer a los defensores; atender y/o retirar a los heridos y consolidar su logística. Actualmente, también, para ocultar y proteger en ellos a civiles.
Miembros del Regimiento Azov del Ejército de Ucrania
Esa
“red protegida de comunicaciones” funciona en todo
momento y tiene sus propios medios de acceso con ocultamiento y
cubiertas, que los protegen contra el fuego pesado enemigo.
La estructura y los medios que brinda Azovstal pueden garantizar la resistencia irreductible de muchas personas durante varios meses.
Rendición de unos 200 soldados en Mariupol.
Su guarnición actual la componen fuerzas de Infantería de Marina (brigada 36), del regimiento de infantería ligera Azov y de unidades selectas y voluntarias ucranianas. El batallón Azov, de tendencias nacionalistas radicales, fue disuelto hace mucho tiempo. Y, una gran parte de sus hombres, seleccionados previamente, fueron incorporados al Ejército ucraniano en el citado regimiento. Los reporteros destacados en la zona de guerra siguen llamándolos el batallón Azov.
¿Cuántos defensores hay? Esto es un secreto militar y cualquier cifra pública está sesgada de partida. El complejo defensivo puede alojar perfectamente a más de 10 mil combatientes.
Se habla actualmente de entre 2 y 4 mil efectivos de partida. Y, está bien, tirando a poco. Entre 5 y 8 mil tropas ucranianas iniciales sería una cifra más razonable. Teniendo en cuenta todo el tiempo que han tenido los ucranianos para organizar la defensa.
¿Está enfermo Putin por la tensión de la guerra?
Se insiste en un millar de civiles escondidos en la “fortaleza Mariupol” y bien podrían ser algunos miles más, en los momentos primeros del ataque. Ya que los túneles miden unos 25 km y, en muchos tramos, llegan a los 6 pisos de profundidad. Recordemos su carácter de “refugio atómico” para una población laboral de decenas de miles de personas. Preparado para resistir impactos nucleares de megatoneladas de TNT, protegiendo a todos sus empleados.
La estrategia militar contra ciudades.
En vista del lucimiento de su ejército y de la presión de sus oligarcas adláteres, ávidos de los negocios y, éstos, necesitados de tranquilidad, Putin está recurriendo, en paralelo con las operaciones militares contra los ucranianos voluntarios y su ejército, a un bombardeo continuo y extenso a la “retaguardia de apoyo” enemiga. Buscando vencer la “voluntad de defensa de Ucrania” con el castigo desmesurado a sus civiles indefensos y la destrucción de sus edificaciones y medios de producción.
Kharkov es la segunda ciudad ucraniana y la segunda más bombardeada después de Mariupol.
Bombardeos rusos en Kharkov contra edificaciones populares.
En algunas poblaciones que disponen de los medios, tras los desalmados bombardeos rusos, los servicios de limpieza salen a trabajar. Retiran los escombros y mimetizan los restos menores con el paisaje. Así, dan un ambiente de serenidad y normalidad al cuadro urbano. Y, esto ayuda mucho a los habitantes de la ciudad a mantener la esperanza, la compostura y una relativa tranquilidad.
El
avance ruso en el Donbass.
Aparece en los territorios del este otro tipo de terreno para la lucha. Está delimitado por: la ribera este del Dniéper, incluyendo su largo recodo hacia el este; el ecumene de Kharkov, al noroeste y la frontera rusa, al este de Ucrania; y los territorios pro rusos de las provincias de Donetz (al sur) y Lugansk (junto a la frontera rusa) y los ya ocupados por Rusia, al sur de Ucrania, en la costa del Mar interior de Azov y al norte de Crimea.
Existe en las Fuerzas Armadas de Rusia un problema de fondo, complejo, estructural, sistémico, como dicen ahora:
No tienen un cuerpo de suboficiales específico, paralelo al cuerpo de oficiales, y de procedencia diferente a las tropas; los soldados más destacados son sucesivamente promovidos y capacitados en las academias correspondientes.
El principio de la unidad de mando en una campaña, con la priorización y jerarquización de objetivos se ha demostrado endeble.
Un pequeño atasco de las agrupaciones de marcha del Ejército de Putin.
La cadena logística para las unidades en campaña, con su dirección y centros informáticos, sus almacenes intermedios, recepción y despacho de productos, medios de carga y descarga, talleres de reparación y los servicios de sanidad, transportes de larga distancia y reparto y personal cualificado en las unidades (del G-4 o S-4).
No Es ahora la red de abastecimiento eficaz, a tiempo y suficiente que se necesita y tendría que ser.
Las unidades de las distintas armas y servicios muestran una escasa capacidad de coordinación entre sí. Para poder realizar con iniciativa, flexibilidad y éxito las maniobras y los combates de armas combinadas. Y, no sólo en la ruptura y flanqueo, sino hasta la profundidad operativa del despliegue enemigo.
Y si bien las doctrinas y reglamentos militares rusos no carecen de los principios y las instrucciones debidas para ello. El problema parece estar en la formación de los mandos, clases y tropas, a cada nivel específico, y las frecuentes maniobras de campo que deberían realizar entre ellos y las unidades.
Algunos sistemas de armas rusos son manifiestamente mejorables y deberían haber sido superados hace tiempo. Por ejemplo, los proyectiles del arma principal de los tanques rodean sin suficiente aislamiento, formando un ataúd infernal, a la cúpula habitáculo.
Todo ello supone una mala organización militar para la guerra de maniobras que se espera desarrollar en la cuenca del Donbass.
Un
primer Pronóstico fundado PostMariupol.
Kharkov es la segunda ciudad de Ucrania, pero no define ninguna otra característica operativa para los planes rusos.
El curso del Dnieper junto a Kiev.
Tras la toma o la neutralización de Mariupol, los rusos concentrarán sus fuerzas en la región, para ocupar el Donbass. Según informó la inteligencia militar estadounidense, Rusia tiene estacionados en la zona entre 60 y 70 mil soldados, unos 40 grupos móviles de batallón. Que es la unidad táctica efectiva que utiliza el Ejército de la Federación rusa.
El límite de ocupación en esta primera gran fase de la guerra en el este, estaría definido por el curso del río Dniéper. Llegar a él y consolidar toda esta zona, supondría que Rusia ha ocupado toda la principal zona industrial de Ucrania (más del 25% de su PIB) y casi toda su costa al Mar Negro.
Por otra parte, Putin podría ya salvar la cara en esta guerra irracional ante propios y enemigos. Aceptando un armisticio con Ucrania, que consolide el status quo conquistado «manu militari»
Mariupol es una ciudad ucraniana a orillas del Mar de Azov. Éste es un mar interior del Mar Negro. Su puerto es la salida para la exportación de las 6 mil millones de Tms anuales de aceros y hierros que producía anualmente su siderurgia Azovstal, una de las más importantes acerías de Europa del Este. Antes de la guerra, Mariupol contaba con 600 mil habitantes.
Stalingrado era una metrópoli soviética abrazada a lo largo de la orilla derecha del inmenso río Volga, cerca ya de su desembocadura. A los inicios de la Gran Guerra por la Patria soviética contaba también con unos 600 mil habitantes. Su industria pesada la constituían armamento y tractores, que empleaban los aceros y hierros como materias primas.
Zelensky dirige desde el frente estratégico operativo.
Mariupol está cercada operativamente por las fuerzas rusas y prorrusas del Donbass. Stalingrado mantuvo su conexión permanente con la otra ribera del Volga, que era territorio soviético. Desde donde le llegaban por la noche en barcazas y ferries los suficientes hombres y pertrechos. Para mantener su resistencia numantina frente al 6º Ejercito alemán, del coronel general von Paulus. Que era la gran unidad de armas combinadas más potente de la Wehrmatch. Y que estaba apoyada por fuerzas de infantería del 4º Ejército Acorazado alemán del coronel general Hoth.
Siderúrgica de Azovstal
A finales de agosto de 1942, las vanguardias alemanas comenzaron a operar contra Stalingrado. Para fines de octubre de ese año, apenas un par de meses después, las posiciones soviéticas en la ciudad se reducían a unos pocos Puntos de Apoyo aislados, llenos de cascotes o deshechos, Situados a no más de 275 ms del Volga. Estas “islas de resistencia”, acrisoladas en el horno de las Privaciones de todo tipo y de la Resistencia a numerosos ataques alemanes, se convirtieron en Irreductibles.
Fábrica Octubre Rojo de armas ligeras, en Stalingrado.
La defensa corría a cargo del 62º Ejército del Teniente General V. I. Chuikov, que comenzó la batalla con 8 divisiones. La defensa rígida de los “puntos de apoyo” citados se ancló en construcciones de Estructura de Hierro, cubiertas con varias capas de Planchas Metálicas. Que no tenían nada que ver con los edificios de la ciudad, que eran de piedra, madera, ladrillo y hormigón o cemento armado con mallas de hierro.
Combate a las distancias cercanas en «Octubre Rojo».
En el extremo sur de la línea de defensa final, ya junto al Volga, estaba un elevador de granos con esa estructura metálica y protegida. Pero, era demasiado estrecho y aislado para resistir indefinidamente. A continuación, siguiendo al norte, estaban sucesivamente las fábricas “Octubre Rojo” de armas ligeras; “Barricada” de tubos de artillería pesada y “Dzerzhinski” de tractores, reconvertida para fabricar tanques T-34 modelo 1941.
Estas fábricas eran de la categoría de las acerías. Como la Azovstal, de Mariupol.
Por su parte, los alemanes carecían de tropas suficientes para todos sus esfuerzos bélicos y necesidades de guarnición en las zonas ocupadas.
Cruce del Volga, en Stalingrado.
Y, en el inmenso frente de Stalingrado atacaba el 6º Ejército alemán reforzado. Pero, con sus flancos izquierdo y derecho Insuficientemente Protegidos por el 8º Ejército italiano y el 3º Ejército rumano y por el 4º Ejército rumano, respectivamente.
En la ciudad de Stalingrado, donde a veces en un solo día, Chuikov perdía más de 10 mil soldados en combate, los hombres y mujeres en armas ya estaban dispuestos a morir en sus puestos. A ello les ayudaba también su idiosincracia eslava: la conformidad, el fatalismo y la sobriedad. Reflejados todos en el lema elegido por sus mandos: “no hay tierra para nosotros más allá del Volga”. Teniendo como única esperanza que ocurriera el anhelado contraataque soviético contra los invasores nazis.
El 19 de noviembre de 1942, la Unión Soviética lanzó su rayo. Aunque de Hitler para abajo los mandos alemanes se esperaban algo, las medidas de camuflaje, decepción y enmascaramiento de los soviéticos los engañaron totalmente. En cuanto al momento, la extensión y la potencia y reiteración de los ataques de ruptura y de explotación de los soviéticos en torno a Stalingrado.
Desarrollo de la invasión rusa a Ucrania.
Kiev era importante para los planes iniciales de invasión de Putin. Su distancia hasta Bielorrusia o hasta la frontera rusa oscila entre los 500 y los 800 km, según las vías y los medios de locomoción empleados. La caída de Kiev en manos de las fuerzas mecanizadas y motorizadas rusas se preveía rápida. Dada la enorme desproporción que señala la “correlación de fuerzas” militares entre Rusia y Ucrania. Y esto llevaría a los ucranianos a tener que aceptar una rendición desfavorable con los invasores.
Bombardeos iniciales en Kiev
Pero, Putin sólo contaba con sus capacidades militares teóricas. Era un “estratega de butacón”. Y, como jefe arrogante y suficiente, muy sobrado, ignoraba o despreciaba sus incapacidades operativas.
Las “puntas de avance” de los grupos móviles de batallón rusos fueron rechazadas por la eficaz “defensa móvil con cesión de espacio” de los ucranianos, en los terrenos de lucha de las cercanías de Kiev.
Así, en vez de días, y si llegase a ocurrir, esa hipotética toma de Kiev va a ser una cuestión de meses para las fuerzas rusas.
La
defensa urbana de las posiciones ucranianas.
No es fácil utilizar y defender unas zonas de rechazo urbanas. Su empleo implica unas elevadas exigencias a los combatientes: Una motivación suficiente (que les anime a tomar la vía de las armas y a arriesgar su vida por su causa), que les aplaque y racionalice el miedo inevitable a la lucha a las distancias cercanas con un enemigo superior, hasta que la veteranía les brinde nuevos impulsos. Un buen entrenamiento en la lucha de infantería, que les dé oficio y confianza. Una lograda cooperación entre las pequeñas unidades que las guarnecen, que les garantice una cohesión sin fisuras en su tenue y magro despliegue y que permita y facilite la conducción y la realización de sus planes. Unos nervios templados por todo lo anterior, que les acostumbre a luchar en solitario o en grupos pequeños, resistiéndose a huir ante la implacable amenaza del omnipresente fuego pesado de Rusia.
Estrategia indirecta de Rusia de ataque contra la retaguardia civil de apoyo
Los defensores ucranianos se protegen extendiendo sus posiciones defensivas más allá de lo necesario en una defensa convencional, cubriendo así una mayor superficie ocupada. En la zona de defensa establecen posiciones de retardo, más o menos reforzadas. Éstos protegen las posiciones más críticas de la zona, incorporan a la defensa los edificios con estructura de acero, especialmente resistentes, y forman trampas de fuego para el enemigo que irrumpe. Los “nidos de resistencia” tienen aquí más importancia, dado que la ocupación de la zona de defensa es más tenue, las vistas son más cortas y existen numerosas vías de aproximación. Dependen de las posiciones de retardo y a ellos se repliegan si son invadidos o destruidos. Existen numerosas posiciones alternativas o de recambio, más de lo habitual en la defensa convencional. Esto permite engañar al enemigo superior sobre el límite anterior de la posición de defensa, su verdadera extensión, los límites de los sectores que la forman, el interés del mando rebelde de la zona en cuanto a su defensa y dispersar el fuego pesado del atacante. En los bordes de las zonas urbanas nunca establecen esas posiciones fijas. Aquéllos son ocupados por avanzadas de combate cuya misión es recibir a los posibles exploradores u observadores civiles, prevenir sorpresas y engañar sobre el trazado de la zona defensiva. Los ocupantes de las avanzadas de combate, distribuidos en parejas de centinelas y alguna patrulla móvil pequeña, se repliegan en su momento hacia los posiciones de retardo más interiores.
Generalmente procuran alcanzar desde el frente, con tiradores aislados o en parejas, a enemigos individuales y pequeños grupos. Y atacar de flanco o de revés a las unidades enemigas que se internan en su zona defensiva. Las cuales ya están disgregadas en secciones o pelotones con uno o dos vehículos blindados. Sus comunicaciones preparadas les permiten aparecer, siempre en pequeño número, detrás o al lado de esas unidades enemigas. Mientras se detienen, se reagrupan, piden o reciben instrucciones, o deciden por dónde avanzar. Y erosionarlas, causándoles algunas bajas. Por ejemplo, desde un sótano o un piso, por un hueco irregular en una tapia, debajo de un vehículo aparcado o destruido o donde emerge un estrecho túnel con la boca cubierta y disimulada. En esas posiciones lanzan algún cohete antitanque o varias ráfagas cortas, siempre apuntando, de ametralladoras ligeras. Aquí, que el atacante presente tres veces más hombres (en medios la proporción debe ser de 10 a 1) no le favorece ni le facilita la labor, sino que le brinda al acosado defensor más blancos para poder emplear su poder de fuego. Sobre todo porque, en un momento dado, es pequeña la proporción de atacantes que están poniendo en apuros a los defensores.
También
poseen una eficaz y creciente defensa antiaérea de corto y medio
alcance. Desde otros patios y azoteas, siempre protegidos por un nido
de resistencia cercano, se disponen varios equipos de portadores
lanzadores de cohetes ligeros antiaéreos. Su localización en el
despliegue se hace en función de las direcciones más probables de
aproximación de las aeronaves militares y las más peligrosas para
la defensa. Si son suficientes y hábiles en disparar, se emplean dos
lanzadores cercanos, pero no contiguos, que forman el equipo, y que
disparan sucesiva y rápidamente contra una aeronave o hacia una
formación enemiga en aproximación inmediata al blanco. El tirador
se limita a dirigir el tubo lanzador ya cargado hacia su objetivo,
esperar que el cohete le confirme la adquisición del blanco y pulsar
de nuevo el disparador. Y a esconderse. Los lanzadores medios
antiaéreos tienen posiciones más fijas y preparadas.
El momento crucial para la defensa ocurre cuando el jefe de la zona decide evacuarla, tras haber detenido al enemigo algún tiempo. Procurando causarle las pérdidas más elevadas posibles, pero sin exponerse excesivamente a una lucha a las distancias cortas, a ser desbordado, ni a perder su libertad de acción. Esto va ligado inexorablemente a la cesión de espacio a los invasores. Para ello se sustrae en su momento oportuno al ataque directo de su enemigo, no a su bombardeo o cañoneo extensivo, impreciso. Los ucranianos tienen suficientes túneles de salida dirigidos hacia edificios no muy cercanos (muchas veces oficiales e incluso respetables (iglesias), oficinas, empresas, algunas viviendas) o matorrales, poco evidentes, en el despoblado. Desde donde se puedan dispersar por la superficie en muy pequeños grupos hacia posiciones amigas de acogida, en los primeros momentos. La protección de la evacuación es vital y las dos entradas de estos túneles están cubiertas siempre por nidos de resistencia, que llevan a cabo una defensa rígida.
LA TOMA DE TENOCHTITLÁN POR LOS ESPAÑOLES Y TLAXCALTECAS DE HERNÁN CORTÉS
La
conquista de México.
Y, el 16 de agosto de 1519, la tropa de Cortés formada por 416 hombres y algunos caballos y cañones, emprendió la marcha hacia el corazón del territorio azteca, en la meseta del Anáhuac. Hicieron una primera parada en Tlaxcala, tierra enemiga de los mexicas. Pero, también de Cortés, porque tenían dioses comunes con estos. Y, ya se sabía que los españoles tenían gran aversión a sus cultos sangrientos. El 5 de septiembre ocurrió la batalla principal entre los tlaxcaltecas y los españoles. Venciendo estos, como ocurrió en Tabasco, a unos indios que lucharon sin concierto, ni mucho ánimo. Esto decidió a los tlaxcaltecas a favor de los españoles, deseosos de contar con esos poderosos aliados para deshacerse de los opresores mexicas.
Don Pedro de Alvarado.
Al campamento de Cortés se acercaron los embajadores de Moctezuma. El “jefe de los hombres” estaba atemorizado por la victoriosa marcha de los españoles y les ofrecía hasta hacerse “vasallo de su rey”. Insistiendo en que no se acercasen a Tenochtitlán. Esto hubiera parecido un botín extraordinario a muchos. Pero, Cortés, como verdadero gran capitán, permaneció fiel a su objetivo principal inicial: la toma de México.
Cortés estuvo tres semanas en Tlaxcala. Y con su poder de seducción inimitable convirtió a los caciques de esa nación y a su pueblo, en fuerzas auxiliares, incondicionales, del caudillo. Así, continuó el avance a Tenochtitlán, acompañado de un ejército auxiliar de muchos miles de tlaxcaltecas. Sin cuya colaboración efectiva, la conquista del Anáhuac hubiera sido imposible.
Los mexicas les indicaron la marcha vía Cholula, donde les habían montado una emboscada. Los españoles fueron recibidos muy bien aquí. Pero, doña Marina y los indios amigos descubrieron los detalles de la emboscada. Cortés atacó con su artillería las posiciones escondidas de los mexicas. Y los tlaxcaltecas penetraron en la ciudad y atacaron y limpiaron las posiciones protegidas de rechazo enemigas: situadas en las azoteas y protegidas por fosos, que impedían los movimientos de la caballería española.
Este desastre aumentó el miedo supersticioso en Moctezuma, el jefe de guerra mixteca. Que afectaría a su posterior comportamiento. Cortés continuó su marcha, apoyado por mil cargadores indios y unos pocos miles de auxiliares tlaxcaltecas.
Lago Texcoco y Tenochtitlán
El camino final para la capital era una gran calzada sobre el lago Texcoco, con agua a ambos bordes, a donde acudió Moctezuma, llevado en andas, con un gran séquito. El encuentro entre los dos grandes jefes fue verdaderamente cordial y satisfactorio. Ya nunca hubo, probablemente, alguna reunión de ambos caudillos, en que la sinceridad llenase tanto los pensamientos y sentimientos de ambos.
Moctezuma les ofreció a los españoles alojamiento en el palacio de Axapácatl. La enorme ciudad impresionó mucho a los españoles. Tenía anchas calzadas y plazas y estaba cruzada por numerosos canales, que hacían de vías de transporte. También tenía muchos mercados y templos piramidales, que rodeaban el centro de la ciudad, donde se ofrecían los sacrificios rituales.
Cortés se dio cuenta de que los españoles estaban dentro de una ciudad desconocida, llena de miles de guerreros enemigos y en medio de un territorio hostil. Y pensó que su mejor garantía era hacer prisionero al Gran Emplumado. Así, el 14 de noviembre, cuando Moctezuma lo recibió en audiencia, Cortés le dijo que se diese prisionero. El Gran Emplumado cedió y fue trasladado al palacio ocupado por los españoles.
Complejo de instalaciones del palacio Axapácatl
En medio de la gran tensión existente, Cortés asaltó el Templo Mayor de los mexicas e hizo retirar las imágenes de Tlacoc, el dios de la lluvia y del dios de la guerra y tutelar de ellos. Y las sustituyó por una imagen de la Virgen María y otra de San Cristóbal. Esto exasperó a los aztecas.
Supo entonces Cortés de la llegada a Yucatán de una gran expedición desde Cuba. Con 11 naos y 7 bergantines, al mando de Pánfilo de Narváez y con más de mil hombres. Enviada por Diego Velázquez para detener a Cortés y sus hombres.
Éste dejó a Pedro de Alvarado al mando de escasas fuerzas españolas en Tenochtitlán. Donde la situación parecía estable y atacó y venció hábilmente en un golpe de mano a las fuerzas de Narváez. Unas tropas españolas poco convencidas, interesadas y motivadas, en luchar contra Cortés. El cual, tras una arenga clara, directa y oportuna las incorporó a sus propias fuerzas expedicionarias. Y regresaron todos a Tenochtitlán, donde la situación se había invertido y amenazaba a todos los “huéspedes de Moctezuma”.
Las tropas españolas entraron ya en una ratonera táctica. Tuvo lugar entonces la sublevación latente, ya esperada y avisada por los aliados tlaxcaltecas de Cortés, de todos los mexicas en Tenochtitlán. El “Gran Emplumado” intentó en vano calmar los ánimos de los mexicas. Pero, para ellos, estando en manos del odiado enemigo, había perdido todas sus prerrogativas y respetos. Y, fue muerto, lo más probable a manos de sus propios vasallos; aunque hay fuentes que dicen que lo eliminó Cortés, porque era un lastre. Esto, sin embargo, va contra la buonomía y el estilo del caudillo español.
Y, ocurre la llamada “Noche Triste” de los españoles. La salida de Tenochtitlán y la táctica de las fuerzas españolas y de sus los aliados, acosada por la doble persecución directa y desbordante de los mexicas. Que pronto rompió toda cohesión de marcha de las fuerzas aliadas. Y, en esas luchas individuales y en pequeños grupos que ocurrieron, caen cientos de españoles y casi todos los tlaxcaltecas. Que mantuvieron la retaguardia del despliegue aliado, en su marcha retrógrada forzada.
Habían caído 600 españoles, el 90% de los tlaxcaltecas y perdieron toda la artillería. Los supervivientes se encaminaron hacia el norte del lago Texcoco y prosiguieron hacia su refugio único de Tlaxcala.
En su camino a Tlaxcala, alcanzaron el valle de Otumba, el 7 de julio de 1520, donde se libró una batalla decisiva y trascendental de la conquista de México.
Batalla de Otumba
Los
españoles habían sido derrotados, no quebrados, y se habían
rehecho. Y su situación continuaba siendo desesperada. Esto espoleó
sus ánimos y la fortuna les volvió a sonreír.
Los mexicanos peleaban en subgrupos compactos, al mando de un subjefe, situados a lo largo de una línea de lucha. En las “interfases de acción con el enemigo” los combates eran singulares. Los de la primera fila se retiraban al cansarse y eran sustituidos por los de detrás y, así, la lucha podía prolongarse durante horas. Como mucho, a veces extendían el frente lateralmente.
Los
españoles buscaban fijar el frente de ataque enemigo y atacar sus
flancos. Actuaban como en pequeños manípulos o
“grupos de armas combinadas”, al mando de un
capitán. Y compuestos por una o dos compañías o “partidas”
de infantería (50 hombres cada una, al completo de sus efectivos),
una pieza de artillería ligera, una culebrina o un falconete, más
ligero y un grupo de caballería, formado por entre 3 y 5 jinetes.
Esto les daba una gran libertad táctica.
Así, penetraban la gran formación indígena de flanco y de frente. Entonces, los indios se sentían, de súbito, conmocionados y desprotegidos. Y, el subconjunto al que pertenecían tendía a desmoronarse en pequeños grupos inconexos, que se dispersaban. Si los españoles llegaban hasta el Jefe de Armas Emplumado, que dirigía la batalla y lo apresaban o mataban, los indígenas mexicanos perdían su “moral de combate” y como su “razón de lucha”. Y, abandonaban en tropel el campo de batalla.
Juan de Salamanca arrebata el estandarte de mando al jefe azteca.
Tras varias horas de lucha en Otumba, el capitán Juan de Salamanca mató al jefe de los aztecas, el emplumado principal del combate, y tomó su estandarte. Esto provocó que los mixtecas, movidos por un resorte anímico invencible, huyeran en desbandada.
Ni que decir tiene que en Tlaxcala miraban con la mayor atención al resultado de esta importante batalla.
Esta derrota fue operativamente trascendente. Los mexicas quedaron aislados en su territorio. Los pueblos sometidos a su imperio dejaron de obedecerlos e, incluso, se unían a los españoles en mayor o menor grado. Los tlaxcaltecas revalidaron su lealtad a Cortés.
Pirámide Cacaxtla, Tlaxcala
En Tlaxcala, el ejército español se recuperó plenamente. Cortés contaba entonces con 550 soldados españoles, 12 culebrinas o falconetes y 40 caballos, porque desde Veracruz recibió refuerzos. Y tenía como apoyo decisivo a muchos miles de tlaxcaltecas, imprescindibles para la lucha urbana y en los canales, que se le presentaba.
Otra
vez, como una fuerza del Destino, de los hados o de la Historia, la
desgracia sacudió a los mexicas, en forma de una epidemia de viruela
que padecieron ese año de 1520. Y que segó las vidas de sus élites
dirigentes.
Primero, Cortés fue atacando sucesivamente y eliminando los puestos militares creados por los mexicas en todo el territorio. Con el fin de que Tenochtitlán no pudiera recibir abastecimientos y refuerzos y su cerco fuera completo y eficaz.
Para el asalto, Cortés dividió a sus fuerzas en cuatro “fuerzas de tarea” a cargo de un jefe superior.
Tres debían atacar y profundizar por las grandes calzadas que accedían a Tenochtitlán. La cuarta sería su reserva, dirigida por él mismo. Aunque el general en jefe debía haber nombrado a un lugarteniente decidido y enérgico para emplearla; comunicando con él. Para poder ocuparse Cortés del control y del mando central de la batalla, que era su oficio.
Como armas esenciales Cortés contaba con 11 fustas, que formarían cada una un grupo naval táctico. Integrado también por multitud de canoas con tlaxcaltecas, empuñando sus arcos, lanzas, mazas y escudos. Un grupo táctico de estos rompía la concentración mexica de fuerzas lacustres en un canal o pequeña laguna.
Cuatemoc, el último emperador azteca
En un momento dado, Cuatemoc, el nuevo Gran Emplumado azteca, escapó con su familia por los canales y fue interceptado por un grupo naval táctico hispano tlaxcalteca. Cuatemoc declaró quién era al jefe español y que les sería más útil vivo, que muerto. Los españoles lo apresaron junto a su familia y dispersaron las canoas mexicas que lo acompañaban.
La lucha urbana se desarrolló por grupos de casas y grandes edificaciones. Las fuerzas terrestres solo contaban con una culebrina. Los españoles intentaron ir avanzando sus “fuerzas de tareas”, siguiendo una gran calzada y atendiendo a las vías laterales. Se fue desarrollando con lanzamientos iniciales de lanzas, flechas, virotes y arcabuzazos. Y, luego, entrando a los edificios por las azoteas y descendiendo a los pisos, en luchas prácticamente cuerpo a cuerpo.
Hacia mediados de agosto, unos días después de la captura de su Gran Emplumado, la resistencia mexica decayó. Según cronistas, el sitio propiamente dicho duró 75 días. La conquista militar de México había concluido.
Los tlaxcaltecas, según un historiador de su etnia, perdieron a unos 30 mil guerreros. Los españoles tuvieron una cifra menor, no aclarada; seguramente algunos cientos de bajas. Los mexicas tuvieron bastantes decenas de miles de muertos, incluyendo mujeres y niños.
No se trata aquí de enumerar y describir todos los beneficios recibidos por los amerindios durante su contacto e inculturación de la civilización hispanoamericana. Veamos una relación de las universidades fundadas en América y la fecha de su institución.
Universidad de San Pablo, de México, en 1551; de San Marcos, en Lima, en 1553; de Sto. Domingo, en Sto. Domingo, en 1538; de Sto. Domingo, de Bogotá, en 1580; de San Fulgencio, de Quito, en 1586; de Santa Catalina, en Mérida (Yucatán), en 1622; Universidad Javeriana, de Bogotá, en 1622; de San Ignacio, de Córdoba (Argentina), en 1622; de San Gregorio, Quito, en 1622; de San Ignacio, en Cuzco, en 1623; de San Javier, en Charcas (Bolivia), en 1624; de San Miguel, en Santiago de Chile, en 1625; de San Borja, Guatemala, en 1625; de San Ildefonso, en Puebla, México, en 1625; Universidad de Ntra. Sra. del Rosario, de Bogotá, en 1651.
Hasta
el último tercio del siglo XVIII existen eventos que prueban que en
las colonias americanas de España, existía una unidad de
intereses sociales y culturales. Que mantenían
razonablemente unidas las distintas regiones hispanoamericanas
en los virreinatos de Nueva España y del Perú.
En 1762, aprovechando que Carlos III había establecido conFrancia un Pacto de Familia, los británicos invadieron La Habana, ocupando rápidamente una amplia franja costera cubana, a la derecha e izquierda de la capital. Los cubanos criollos y mulatos se unieron a las fuerzas españolas, en la resistencia armada contra el invasor. Y, luego, la población civil participó en una resistencia de desgaste y oportunidad: atacando al arma blanca a británicos aislados; invitándoles a comer ciertas frutas autóctonas y a beber ron…
Pepe Antonio, jefe de milicias hispanocubanas contra el desembarco inglés en 1761.
A primeros del siglo XIX, ya se había fraguado en la América hispana, en grados variables según los países, una clase social “media ilustrada”. Que se basaba en las ideas de libertad, igualdad e independencia proclamadas, primero por la revolución estadounidense, a la que España ayudó, y, luego, por la revolución francesa. Eran las revoluciones de la burguesía como clase social de vanguardia. Y, bajo esta primera capa ideológica enarbolada, también estaba la disposición de hacer valer sus derechos como clase social emprendedora. Basados en el libre comercio y la revolución industrial de finales del siglo XVIII, que aportaban nuevas mercancías para el comercio y el intercambio internacional.
Por otro lado, la falta de dirección central administrativa y real, provocada por Napoleón con el secuestro de la familia real y la invasión de España, permitió que las burguesías criollas territoriales intentaran ocupar el vacío de poder creado. Y se alzaran en armas contra los gobiernos locales españoles en una lucha por su independencia.
BURGUESÍAS CRIOLLAS
Ya, la aparición de los anhelos por esos derechos y nuevos destinos históricos, creó una falla profunda en las sociedades hispanas locales. Que eran incapaces por ideología, intereses e instrumentos políticos adecuados, de retener unidos los distintos grupos rebeldes criollos. Y formar así una Unión de Naciones hispanas. Que tuviera una plena capacidad operativa propia, ensamblada por un espíritu y una integración socio política, al más alto nivel de intereses y ventajas.
Creando una gran Federación de Estados de Sudamérica o una Comunidad de Naciones Hispanoamericanas, según los polos políticos de independencia y de asociación de intereses generales.
El
origen de la conquista de México.
En 1511, Diego Colón, que tenía su capital en La Española, propuso conquistar y colonizar la vecina isla de Cuba. Para ello se designó una corta fuerza militar al mando de Diego Velázquez, con experiencia en la guerra, pues había servido 17 años con las tropas de Europa. La expedición, al mando del lugarteniente de aquél, Pánfilo de Narváez, recorrió la larga isla de este a oeste. Sin encontrar resistencia reseñable entre los indios taínos cubanos, que eran de carácter pacífico, como los de La Española.
Tras la conquista, Velázquez fue nombrado gobernador de Cuba. Y se ocupó en promover la prosperidad y la población de la isla. Esos asuntos del gobierno no le impidieron atender a los descubrimientos que otros hacían por el continente. Y se interesó por esas aventuras de gloria y riqueza.
Una primera exploración enviada por Velázquez, mandada por Hernández de Córdoba, fue a dar a la península de Yucatán. Donde, el cultivo de la tierra por los naturales, su espíritu guerrero y la calidad de construcción de sus edificios, indicaba una civilización muy superior a lo que los españoles se habían encontrado hasta entonces en América.
Diego Velázquez solicitó autorización a los monjes jerónimos, que gobernaban Santo Domingo y al rey de España, para proseguir con la conquista y la colonización de esas tierras recién descubiertas. Y fue buscando a un lugarteniente con capacidades para realizarlas y participar en los importantes gastos de la expedición. Y, tras algunas demoras y consultas, encontró a Hernán Cortés. A quien Velázquez le anunció su intención de nombrarle capitán general de la armada expedicionaria.
Cortés invirtió todo el efectivo que poseía e hipotecó sus posesiones en Cuba para comprar barcos y reclutar hombres. Ayudando a los más pobres y ofreciendo un reparto generoso de las riquezas que anticipaba lograr. Aquí se apreciaron las dotes de mando, por el ejemplo y la actividad, de Cortés. Muchos le imitaron, usando su peculio personal e hipotecando bienes, para poder equiparse y enrolarse en la expedición.
Esto inquietó mucho a Velázquez, que era un mando corriente, un buen administrador. Pero, que carecía de las cualidades de arrastre de hombres de Cortés. E intentó impedir la salida de la expedición de conquista.
Pero, ya era tarde. La armada partió el 18 de noviembre de 1518 de Santiago de Cuba. Las 11 pequeñas naves llevaban 518 infantes, 32 ballesteros, 13 arcabuceros, 16 jinetes y 110 marineros. También portaban 32 caballos, 10 cañones de bronce y 4 falconetes. Cortés era ya un caudillo rebelde, que no dejaba detrás más que enemigos rabiosos y acreedores.
El piloto Antón de Alaminos, experimentado en esos mares, condujo la flota hasta el río Tabasco. Allí les recibieron una multitud de indios hostiles y fue preciso usar las armas para avanzar. Siguió una dura lucha, donde la artillería y las largas espadas castellanas tuvieron el papel principal. Cortés, a caballo y con un selecto grupo de jinetes a caballo, que no podían ser muchos, decidió la batalla, con su ataque impetuoso a los indios.
A final de marzo, los caciques locales ofrecieron al capitán general víveres, joyas y telas y 20 mujeres esclavas. Una de ellas, de nombre Malinche en su lengua, era la que tras su bautizo fue llamada doña Marina. Hablaba el maya y el azteca y se convirtió pronto en una leal, inteligente y utilísima consejera de Cortés. Allí supieron los españoles de la existencia, hacia el oeste, de un país llamado México, de donde procedían los objetos preciosos.
Doña Malinche y Cortés
El 2 de abril llegó la flota a san Juan de Ulloa. Allí, se acercaron en canoas hasta las naves los embajadores de Moctezuma, jefe supremo militar, político y religioso de los mexicas. Que los españoles consideraron un “emperador”. Cortés usó con ellos su afabilidad y empatía y les mostró el uso de sus medios militares. Los embajadores retornaron pronto a Tenochtitlán, su capital.
Un tal Tendile regresó con un rico presente de joyas y Cortés le comunicó que deseaba visitar a Moctezuma. Éste volvió para ver a su emperador, pero, regresó con otro regalo y rechazando esa visita de Cortés.
GUERREROS AZTECAS.
Poco después, recibió Cortés a 5 indígenas de Cempoala, que le contaron que su pueblo era enemigo mortal de los mexicas. Y que, conociendo las victorias de los españoles, querían ser aliados de ellos para liberarse de la opresión azteca.
Hernán Cortés se fue formando una idea clara de la relación de los mexicas con otros pueblos de la meseta del Anáhuac. A mediados del siglo XV, los mexicas se reforzaron con el establecimiento de una confederación de las tres ciudades principales: Tenochtitlán, Telzcoco y Tlacopan. La superioridad militar y política le dio a los aztecas una autoridad social grande en las tierras mexicas, desde el Atlántico hasta el Pacífico. La confederación estableció puestos militares esparcidos por el enorme territorio controlado. Pero, que contenía pueblos insumisos, no integrados, especialmente en Tlaxcala, de entrenados y valientes guerreros.
Cortés pronto pensó en que podía emplear a su favor: la amistad con los pueblos insumisos y el aura sobrenatural, supersticiosa, que envolvía a su pequeña fuerza. Para apoderarse de los tesoros de ese inmenso territorio continental.
Para ello, necesitaba que sus hombres participaran en esa decisión. Los partidarios de Velázquez que estaban en la expedición, pensaban que Cortés no tenía poderes para colonizar esas tierras. Sino para rescatar sus tesoros de los indios, a cambio de quincallería. Y que debían volver a Cuba con las riquezas ya adquiridas.
Construcción de la Villa Rica de la Vera Cruz
Otra mayor parte de los hombres opinaba que no era el momento de echarse atrás; de que todo acabara entregando a Velázquez los tesoros logrados. Y, estos acordaron con Cortés fundar una villa en su campamento de chozas, la Villa Rica de la Vera Cruz, por haber desembarcado allí un viernes santo, dotada de una estructura administrativa suficiente. La ciudad fue trasladada poco después un poco más al norte, a una amplia ensenada.
Y,
Cortés se proclamó con su beneplácito, capitán general de
las tierras, dependiendo directamente del Rey. Puesto que
Velázquez no tenía mando sobre ellas. Esto aplacó los resabios de
los favorables a Velázquez y evitó un conflicto armado en la escasa
tropa.
Las fuerzas españolas se pusieron en movimiento hacia el norte, siguiendo el litoral, a la vista de los barcos. En Quiahuiztla tuvieron más pruebas de la hostilidad de los otros pueblos hacia los aztecas. Llegaron, entonces, malas noticias desde Cuba. Velázquez había conseguido de Carlos I de España (13/11/1518) el cargo de adelantado del Yucatán, para descubrir y poblar esas tierras. Cortés envió a la corte a dos de sus capitanes mejor comunicadores, con lo mejor del botín obtenido y solicitando el nombramiento para él.
Fue entonces cuando Cortés tomó la decisión de “quemar sus naves”. Colocando en “terreno mortal” a sus hombres, como diría el maestro Sun. Para que entendieran que sólo hacia adelante había vida y, por consiguiente, riquezas para ellos. Realmente, Cortés mandó barrenar a los navíos cerca de la costa. Y, de paso, mandó ahorcar a algunos partidarios de Velázquez que se habían soliviantado mucho.
Algo parecido ocurrió mucho después, a fines de 1942, en la batalla por Stalingrado. Donde los soviéticos siempre recibían refuerzos y medios desde el lado izquierdo del Volga, en ferries. A las tropas del ejercito del general Chuikov, que la defendían del 8º ejército alemán, la gran unidad más poderosa entonces de la Wehrmacht, les decían “no hay tierra para nosotros al otro lado del Volga”.
LA TOMA DE TENOCHTITLÁN POR LOS ESPAÑOLES Y TLAXCALTECAS DE HERNÁN CORTÉS
Introducción.
Los actuales estudios históricos con motivo de este medio milenio desde la toma de Tenoctitlán, presentados principalmente en Hispanoamérica, arrojan nuevos datos sobre aquellos trascendentales hechos.
Hay pinturas y tapices antiguos que presentan a bergantines españoles luchando en el lago de Tenochtitlán. ¿Cómo aparecen barcos de ese porte y calado en la batalla por la capital azteca?
Los bergantines son veleros de 150 tm de desplazamiento, capaces de realizar grandes travesías marítimas. Tenían una sola cubierta y dos mástiles con sus extensas velas, que le daban un buen equilibrio en el mar y buenas características de navegación. Llevaban hasta 24 cañones entre ambas bandas y una tripulación de 100 hombres.
Las fustas son barcos de unos 15 ms. de eslora y 3 de manga. Llevan una vela central y 6 remos individuales a cada lado. A proa y a popa tienen unas posiciones de combate más altas, donde van 5 o 6 infantes. A proa pueden llevar un cañón ligero o culebrina.
También nos decían que Cortés quemó las naves que le trajeron desde Cuba a México. Y, esto es casi un dogma, un axioma de guerra y, además, argumentado seriamente, con razones de moral y firmeza... del jefe español.
Parece
ser que Cortés encalló sus naves en Yucatán,
tiempo después del desembarco. Y que sus restos y
aparejos fueron usados por Cortés para crear sus 12 fustas, barcos
con el calado y el largo adecuados, empleadas en Tenochtitlán.
A
donde fueron llevadas desmontadas desde Yucatán
por 1500 indios porteadores. De
los 13 cañones ligeros con los que contaba Cortés entonces,
una docena fueron destinados a armar sus fustas.
Hernán
Cortés, el mando conductor de la conquista española.
¿Hablamos de la personalidad de Hernán Cortés? Sí y no. Desde luego, es un personaje muy controvertido. Sobre todo si lo analizamos y presentamos con los criterios de épocas diferentes a la suya. Y, más en estos tiempos posmodernos, en los que celebramos el 450º aniversario de su conquista de México. Que él, sus hombres y aliados y sus sucesores convirtieron en la Nueva España de América, que perduró durante 3 siglos.
HERNÁN CORTÉS, IDEALIZADO
Según quién lo analice y encuadre, bien los populistas, indigenistas o revisionistas históricos es un tipo deleznable. Al que le atribuyen todos los males sufridos. Incluyendo los apellidos españoles, de los que no reniegan aquellos y que les dan identidad legal y social a todos ellos. Bien, los españoles nacionales, que incidirán especialmente en las gestas que España realizó en las Américas del Norte y Central.
O bien, los historiadores serios, hispanistas o no, destacando, para mí, como ejemplo de dos épocas diferentes, Hugh Thomas y William Prescott. Ambos con un ingente trabajo de investigación extensa y rigurosa. A la que sólo puedo admirar, reconocer y utilizar.
Yo intentaré presentar a Cortés no por los datos y los lugares comunes a los que todos podemos acceder. Sino, por sus hechos, su trayectoria y sus frutos. Y, la trascendencia que tuvieron. Esto no lo puede olvidar u ocultar nadie, salvo con intenciones deliberadas y partidistas.
Cortés es un hombre en el que destacan más las capacidades intelectuales y sociales, que las puramente militares. Tiene una gran elocuencia, que alimenta su capacidad persuasiva. Fue capaz de influir muchas veces en el ánimo y la conducta de sus jefes y soldados. Convenciéndolos de seguir el camino lleno de vicisitudes y reveses que él les señalaba. Del que sólo Cortés vislumbra y comprende el final o la meta. Es un personaje proclive y perfeccionado en la acción.
Y, ya extrapolando intelectualmente ahora, es el impulsor de sus hombres, en medio de contrariedades y dificultades casi continuas. Siguiendo una corriente históricamente inexorable, aunque Cortés ya no estuviese presente:
hacia metas socio políticas nuevas y florecientes, en un parto singular y único de la Humanidad; buscando una tierra nueva, unas gentes nuevas, que produjesen con su raza hispana un mestizaje internacional único de la Historia.
Los
mixtecas se establecen en México.
Los mexicas llegan a México desde el norte hacia el comienzo del siglo XIII. Primero se asentaron en diversos puntos del valle de México, como pueblo nómada que eran. Y, en abril de 1325 se establecieron, por fin, en la orilla suroeste del lago principal del valle, el Texcoco. Donde, según los augurios de sus sacerdotes o chamanes, divisaron a una espléndida águila real posada en un nopal, que llevaba en sus garras a una serpiente. Allí comenzaron a asentar los cimientos de su futura ciudad, clavando estacas en los lugares menos hondos. Pues, esos terrenos lacustres estaban medio hundidos.
ESCUDO REPÚBLICA DE MÉXICO
Pronto,
fueron aliándose con otros estados vecinos. Y, ganaron territorio
también a costa de la derrota de algún enemigo, como suele ocurrir
en las guerras entre los pequeños estados.
La forma de gobierno de los aztecas era la monarquía casi absoluta y de carácter electivo. El candidato solía proceder de una misma familia y era elegido por un colegio de electores formado por cuatro nobles principales aztecas y, honoríficamente, algún rey aliado, como el de Tlazcoco. Y, debería ser un destacado guerrero; aunque el último, Moctezuma, procedía del sacerdocio. Esta formación suya, sin duda influyó negativamente en sus dudas y pensamientos acerca de esa llegada a sus tierras de unos hombres diferentes y extraños, supuestos ancestros aztecas, en actitud beligerante.
La
profesión de las armas atraía especialmente la instrucción y los
honores públicos. Como no podía ser menos en un estado belicoso y
expansivo, que sojuzgaba a los súbditos y aliados. El dios tutelar
de los mexicas era su dios de la guerra.
Para excitar la ambición, la competición y la emulación en sus súbditos, los reyes mexicas establecieron varias órdenes militares, cada una de las cuales tenía sus trajes e insignias propios y sus privilegios. A los que no podían aspirar aquellos guerreros que no hubiesen hecho alguna proeza, al menos, sencilla.
MOCTEZUMA
Los
aztecas
y mixtecas
contaban con un variado panteón de dioses. Donde reflejaban sus
necesidades internas y sus temores anímicos. El
más importantes y significativo era su dios
de la guerra, Hietzicoalt,
y su culto. Violentos
como eran los aztecas, presionando centrífugamente en sus fronteras,
su dios Hietzicoalt
reclamaba sangre humana de sus enemigos vencidos y capturados. Para
quedar satisfecho y ser benévolo con su pueblo.
En el año de 1487, los mexicas inauguraron la pirámide principal de Tenochtitlán. Para celebrarlo se sacrificaron a 80400 personas en un solo día. Fue el holocausto mayor en menos tiempo, conocido por la Humanidad.
PENACHO DE MOCTEZUMA
Curiosamente,
Heitzicoalt
también formaba parte del panteón
de otras tribus
que vivían por el centro de México.
Esto
creaba un problema logístico para todas las tribus. Para satisfacer
esta “necesidad
ritual”
todas las tribus acudían periódicamente a luchar en las “guerras
floridas”.
Y, ¿eran realmente guerras?
No, eran exterminios calculados y tolerados. Así, a cada bando se le daban todas las oportunidades para prepararse bien para las batallas. No se contemplaba desplegar correctamente las fuerzas propias, para imponer la voluntad sobre el enemigo, en una dialéctica de las armas. Ni tampoco, según el principio universal de la economía de medios, buscaban conseguir la victoria con el menor gasto en hombres, medios y tiempo.
¿Qué buscaban estas “tribus ingenuas y naturales”? Conseguir el mayor número de enemigos prisioneros en combate, para ser ofrendados a Hietzicoalt en lo alto de sus altares piramidales. Esto hubiera sido blasfemo, impío, anatema, haram, infiel, kafir para cualquiera de las religiones monoteistas del mundo.
La civilización y el imperio mixteca, en la Edad de Piedra, se mantenía cohesionado por el terror y la fuerza sobre sus súbditos y vasallos, que lo rodeaban en su periferia. Y ésta fue su debilidad intrínseca esencial. Que facilitó la acción Híbrida y calculada de Cortés. Los mixtecas habían alcanzado su “punto de culminación”en su vivencia imperial. Y el evento externo de la aparición agresiva de los españoles, los hizo entrar abruptamente en la fase de declive de su “trayectoria vital social”.
TENOCHTITLÁN
Va a preñarse a partir de ahora un paso esencial de lo mixteca a lo cristiano. Y un enriquecimiento cualitativo fundamental en los parámetros de civilización de los pueblos indígenas de Mesoamérica. La Historia de la conquista de México concluye con la toma de Tenochtitlán por los españoles y sus aliados indígenas mexicanos.
La
colonización española de México.
España
realizó un inmenso y prolongado trabajo de inculturación
de los amerindios
asentados en sus tierras de dominio.
Cortés no podía casarse con la india Malinche, doña Marina, por estar casado previamente con Catalina Suárez. Y casó a doña Marina con un lugarteniente y atendió y protegió a su hijo Martín Cortés, fruto de su unión con ésta. También fue procurando que sus jefes o capitanes se fuesen casando con diversas princesas indias.
En cuanto a la catequesis de su religión, los españoles y los frailes franciscanos que los acompañaban en el siglo XVI, fueron aplicando una didáctica práctica, realizable y exitosa. Se les fue tolerando a los indios una conversión de costumbres atractiva, positiva y sucesiva. Era una especie de sincretismo práctico tolerable y extinguible, armonizado con una catequesis progresiva de la religión católica. Se trataba de, defendiendo y respetando el dogma, es decir, las verdades de la fe, ir realizando poco a poco, pero firmemente, la conversión religiosa y social de las costumbres y los hechos de los nativos.
Los virreinatos españoles de América fueron el de Nueva España, establecido en 1535, con capital en México y jurisdicción por todo el territorio de América del Norte y Central, y el de Perú, establecido en 1542, con capital en Lima, extendiéndose por toda América del Sur, excepto Venezuela y la Colombia centroamericana (hoy, Panamá). Al Nuevo Mundo se le aplicaban las leyes de Castilla. Y, legalmente, tanto la Península Ibérica como América estuvieron en igualdad de categoría. Los habitantes de América eran vasallos del Rey de España y, por depender del rey, no podían ser esclavizados, ni abusados contra las leyes.
A las distintas regiones americanas les unía el lazo dinástico, fuente de derechos, y una serie de organismos administrativos y funcionales, que tenían jurisdicción propia y simultánea en la Metrópoli y en las regiones de América. Esto llevó, salvando las particularidades americanas y su idiosincrasia, a una estrecha unión entre los territorios españoles. Aunque no se puede pensar en una fusión moderna, dotada de los medios actuales.
Además de las 2 instituciones que controlaban las leyes americanas (el Consejo de Indias, desde 1524) y el comercio internacional (la Casa de Contratación, desde 1503), la Administración española se desempeñaba desde América.
El
centro de gravedad no es una unidad propia, ni su
misión, no es un punto en el espacio o un rasgo físico predominante
hacia donde se dirige un esfuerzo (objetivo clásico), ni tampoco es
una unidad enemiga.
El
centro de gravedad es un flujo de ideas coordinadas en
aplicación variable, generando acciones originales
tras cada una de ellas, para el cumplimiento de la misión y el
objetivo. Originalidad, flexibilidad, variabilidad,
consistencia, no predictibilidad por el enemigo y eficacia deben ser
características esenciales del proceso de su establecimiento.
En la práctica, el centro de gravedad es el
instrumento de dirección, concentración, impulso y trabajo que
posee el jefe para enfocar y unificar, hacia la
realización de los objetivos y misiones recibidos, todos los
esfuerzos de sus unidades subordinadas, tanto de
combate como de apoyo y soporte.
El
jefe se debe centrar en sus objetivos y misiones mediante el centro
de gravedad creado y siguiendo como metodología la
aplicación de los “sistemas operativos de maniobra”.
La
concentración de esfuerzos.
En
cuanto a la concentración, el llamado “esfuerzo
principal” expresa un efecto de penetración en una
dirección y un sentido dados, pudiéndose llegar a la ruptura y
posibilitar una explotación. En él se concentran los esfuerzos
interarmas de las unidades, incluso las aéreas.
El centro de gravedad tiene un sentido más espacial y temporal, buscando una “convergencia operativa” de “esfuerzos relacionados” hacia un objetivo. No necesariamente contiguos, simultáneos o secuenciales aquéllos. Sino sinérgicos y resultantes en sus efectos y resultados y teniendo en cuenta la forma óptima de actuar de cada arma y servicio o «medio de intervención» del Estado.
El
centro de gravedad es más global u holístico, el
esfuerzo principal es más sumatorio y acumulador. El esfuerzo
principal se ejemplifica en la estrategia de martilleo de Foch en el
frente occidental europeo, a partir del verano de 1.918, para vencer
la capacidad de combate alemana por pura erosión de la misma en todo
el teatro de operaciones. Trasladándolo sólo de dirección, cuando
la resistencia de un sector alemán era excesiva.
Los
efectos del esfuerzo principal son más directos, predecibles y
evidentes. Los del centro de gravedad son más sutiles
e inesperados, al menos en los primeros estadíos de la
acción militar.
El esfuerzo principal es un instrumento del nivel táctico, que no debería ser generalizado a los otros niveles. El centro de gravedad puede ser utilizado en toda la actividad dialéctica donde concurren medios varios, tanto en número como en naturaleza, tanto cercanos como lejanos, que puedan ser empleados en ella. Dentro de cada nivel de actividad militar, empezando por el superior, se crearía el centro de gravedad.Armonizando y conjugando todas las actividades, para conseguir el efecto, el objetivo más trascendente en el mismo.
Funcionamiento.
En
el nivel estratégico serían la o las vulnerabilidades
críticas del enemigo, al menos aquéllas dentro del teatro de
operaciones. La naturaleza de éstas estaría conformada por una
componente política importante. A nivel operativo, el
centro de gravedad se crearía sobre la o las
vulnerabilidades críticas de la campaña. A nivel táctico,
sería el objetivo que condujese a hacer operativamente trascendente
la batalla. Si ésta fue correctamente planteada, como necesaria para
la dirección operativa, el objetivo debería ser el que
condujese a la decisión en ella y/o a la explotación de la
victoria.
El centro de gravedad supone una acción centrípeta de todas las líneas de actuación, de la actividad “ramificada” de todas las unidades y los servicios. No necesariamente coincidentes, pero sí convergentes y resultantes en su eficacia y en su resultado.
ALEGORÍA DEL FUNCIONAMIENTO DEL CENTRO DE GRAVEDAD
Siguiendo las líneas “ramificadas” de comunicaciones, se aprovechan la situación de partida de cada fuerza y la transitabilidad del terreno, buscando la utilización óptima del conjunto interarmas, de las reservas y de la logística.
Mediante
las líneas de avance o de acción diferentes inducimos
incertidumbre en el enemigo, dispersamos su capacidad de rechazo y
perturbamos su plan de defensa y su conducción sistemática.
Las líneas ramificadas, en una acción centrípeta final, son propias del centro de gravedad. La acumulación de fuerzas en un sector, reiterando (unidades intercaladas o sucesivas) o potenciando (tanques, estrechamiento del sector y mayor soporte de fuego) el esfuerzo, es propia del concepto de esfuerzo principal.
Un
ejemplo del empleo del centro de gravedad siguiendo
esas líneas “ramificadas” a nivel estratégico, nos lo da
Napoleón con sus operaciones para la rendición de Ulm
contra el ejército austríaco del general Mack y del
Archiduque Fernando de Austria.
En un amplio avance de sus cuerpos independientes, el Grande Armée (unos 210 mil hombres) cruzó el centro de Alemania, desde el Rin al Danubio. Con esto se interpuso operativamente entre los austríacos (unos 40 mil hombres) y las fuerzas rusas aliadas que acudían a ayudarlas. Los franceses iniciaron el cruce del Danubio el 7 de octubre de 1.805. Y, durante toda la semana siguiente, Napoleón hizo converger en una enorme espiral constrictora a la mayoría de sus cuerpos de ejército sobre Ulm. Mientras una fuerza suficiente vigilaba la llegada por el este del general ruso Kutuzov.
EL GENERAL MACK SE RINDE A NAPOLEÓN A LAS AFUERAS DE ULM
El general Mack realizó en vano varios intentos de ruptura, con los mayores esfuerzos en Haslach y Elchingen. Los dos comandantes austríacos se pelearon entre sí y el archiduque Fernando con sus 6.000 jinetes se separó del grueso e intentó escapar en la dirección noreste, al encuentro de los rusos.
Por su parte el general Mack y el resto de sus hombres (unos 27.000, tras las batallas citadas), con Napoleón en abrumadora mayoría a las puertas de la ciudad de Ulm desde el 14 de octubre, salieron afuera para rendir las armas a los pies de las estribaciones de los montes Michelsberg. La capitulación se firmó por el general Mack el día 20. Las fuerzas del archiduque Fernando fueron rodeadas y vencidas por el cuerpo de ejército de caballería de Murat, cerca de Trochtelfingen. Otros 12 mil austríacos se rindieron en Neustadt. La campaña, sin combates propiamente dichos, le costó a Austria más de 50.000 hombres de sus fuerzas iniciales de unas 70.000 tropas.
Mecanismo
y Realización.
El
centro de gravedad dirige, canaliza, recoge y orienta
la creación y la dirección de los esfuerzos de las distintas
unidades y apoyos en cada caso. Su cambio por el mando permite la
continua adaptación de aquéllos a las circunstancias y el
mantenimiento de los objetivos intermedios generales siempre
presentes.
El
centro de gravedad tiene como factores eficaces
a la velocidad de operaciones y a la logística. La primera permite
la actuación óptima de la capacidad de combate de las fuerzas y la
segunda minimiza o compensa el “desgaste” inevitable de la
capacidad de movimiento y el posible de la capacidad de
combate durante las operaciones decididas.
Sus factores negativos de realización son la mala transitabilidad, incluso la inducida por obstáculos, cortaduras y campos de minas, y los combates no deseados por el mando propio. La primera “desgasta” la capacidad de movimiento operativo y la segunda “agota” la capacidad potencial de combate.
Sin
esas capacidades, la fluidez, la sinergia y la actividad
ramificada del centro de gravedad tiende a revertir en
un esfuerzo principal en una dirección operativa,
rápidamente conocida por el enemigo. Las “ondas de
conmoción” que generamos sobre el enemigo,
transversalmente a nuestro avance en su zona operativa, disminuyen
con ello en intensidad y frecuencia, hasta, quizás en el extremo,
desaparecer.
Los
elementos directos de actuación en el centro de
gravedad son los conjuntos interarmas, las reservas del propio o
superior nivel (pudiéndose llegar a la masa de apoyo, o retaguardia)
y la logística. Con ellos se actúa, una vez concebido el centro
de gravedad, para crearlo, aplicarlo y desarrollarlo,
mediante los sistemas operativos de maniobra.
El
desarrollo y el futuro.
La
Guerra Híbrida, ¿es un escolio?
Bueno,
pero este concepto para el mando puede ser útil para las guerras de
I, II, III y IV generación (según la denominación de los EEUU,
ampliamente “aceptada”). Pero, ahora abordamos la era de la
guerra de V generación: La guerra híbrida o
miltifacética o multifuncional.
Empleando, además, métodos digitales, informáticos, usando la precisión y la discriminación que permiten los algoritmos matemáticos y la tecnología de radiaciones y pulsiones electromagnéticas.
OTAN REFUERZA RUMANIA COMO PARTE DEL CENTRO DE GRAVEDAD DE DEFENSA DE EUROPA
Pero es que, justo, este modelo de enfrentamiento dialéctico con su componente variable de fuerza física, necesita una integración armónica y holística de los medios multidisciplinares disponibles. Enfocándolos a lograr los objetivos diferentes simultáneos o sucesivos, que queramos conseguir. Y preservando el principio universal de la optimización y el ahorro de medios.
Y, el instrumento integrador necesario es el centro de gravedad del «esfuerzo nacional total».
Otra
característica de la organización social de estas tribus
fronterizas semi independientes es que impulsan una relativa
endogamia. Con ella buscan aislar, proteger, mantener o fomentar su
idiosincrasia, su influencia y su patrimonio. Pero, sin que sea
biológicamente perjudicial su uso. Como sería entre los
miembros de una misma familia o clan pequeño o cercano. En efecto,
los matrimonios no sólo suponen y conllevan intercambios de
individuos entre las familias de los contrayentes. Producen también
intercambios y flujos de regalos, visitas, relaciones y parcelas de
poder. En unas sociedades poco evolucionadas y residentes en un medio
difícil y, a veces, rodeadas temporalmente de hostiles, las
relaciones matrimoniales producen un “ingreso”, unos
aumentos de posiciones sociales, influencias y bienes, que
son muy apreciados por aquéllas.
Operatividad
talibán.
Los
pueblos montañeses son numerosos, pequeños y diseminados por las
zonas fronterizas de Afganistán y
Pakistán. En ellos se pueden camuflar un pequeño grupo de
Talibanes, a la espera de que pase de largo un avance militar.
Aparte, los Talibanes gozan de un sistema complicado de cuevas
naturales en varios niveles, reforzado por túneles de
comunicación, dotados de zonas ampliadas para la espera y el
almacenaje de bienes de todas clases. Este sistema es utilizado para
facilitar el tránsito entre uno y otro país, sin tener que utilizar
los pasos fronterizos o desfiladeros más habituales y conocidos,
como “etapas” del trayecto completo deseado. Y como
refugio temporal cuando los aliados llevan a cabo
operaciones de búsqueda de rebeldes o de represalia, sobre zonas
pashtunes donde han sido más activos. Los Talibanes son de la etnia
pashtun. Sólo los distinguen de las tribus locales su mayor
proselitismo religioso y su actividad militar.
Parte de los lugareños con los que se encuentran los soldados en sus
patrullas y registros, son Talibanes “a tiempo parcial”
y simpatizantes. Dos o tres hombres de un grupo de nativos que
transitan por un camino rural, pueden ser una semi escuadra de
Talibanes moviéndose de un lado a otro.
La
clave operativa de los talibanes reside en sus
innumerables jefecillos locales, con sus pequeñas
bandas de guerrilleros. Ellos son los responsables de intimidar,
aleccionar, asustar, atacar y ocupar más o menos temporalmente
algunos de los numerosos poblados y caseríos. Según el grado de
presión que deban ejercer sobre los lugareños para que les
informen, les escondan y les ayuden. Evidentemente su elemental
grado de desarrollo operativo mantiene al movimiento a la
defensiva. Sin poder disputar a ultranza
a ninguno de los ejércitos presentes en esas áreas ningún
territorio o pueblo. Sin poder realizar otras acciones más allá de
las emboscadas, los ataques a las pequeñas unidades enemigas
aisladas, el hostigamiento por el fuego a media distancia, el
secuestro, incursiones aisladas de corta duración y el minado de
caminos y veredas. Concentrados ideológicamente en la conversión a
su movimiento, a sus células semi nómadas, de los pashtunes más
afines o cercanos.
Aunque están dispuestos a morir por sus ideales, con la promesa de la estancia en uno de los Siete Cielos del Islam, en el primero de los cuales reside Abrahán, al que visitan diariamente unos 50 mil ángeles, los Talibanes no dudan en retirarse ante el ataque o la resistencia decidida y tenaz de su enemigo militar.
Su procedimiento usual para atacar una posición débilmente defendida o sin ánimos de lucha es éste: bombardean de madrugada con fuego pesado de lanzacohetes fijos; luego se acercan para emplear los morteros; por fin, el asalto lo realizan varias escuadras independientes que convergen, avanzando y disparando ráfagas de AK y ametralladora RPD o PK y lanzagranadas RPG y RL. Las armas pesadas disparan desde los lados de las escuadras y el fuego se dirige de arriba a abajo o de abajo a arriba o a blancos comprobados. Para evitar las bajas por fuego amigo.
La
lucha por las mentes y las voluntades.
Los Talibán consiguieron implantar su régimen “teocrático radical intransigente global” luchando contra los señores de la guerra regionales y unificaron Afganistán. Establecieron una estructura socio política laxa y débil, pero suficiente, para darle un poco de empaque al país. Regional y localmente, controlaban los órganos tribales de poder y, paralelamente, poseían pequeñas guarniciones de irregulares y de milicianos. Que eran suficientes para controlar y gobernar esa estructura estatal.
Desplazados del poder hace 20 años, su tenue y suficiente estructura político religiosa permanece y sus guerrillas y fuerzas semirregulares operativamente avanzan y retroceden. Adaptándose plásticamente a la lucha contra un ejército regular nacional de pacotilla. Que contaba con el apoyo de fuego pesado aéreo y terrestre de las fuerzas de los países de la OTAN desplegadas por el país. Y con las fuerzas de élite de aquéllos, para acciones puntuales de búsqueda y destrucción de las guerrillas islamistas. Operaciones que, por lo general, resultaban de eficacia mediocre, por debajo de lo planificado en los cuarteles generales.
El Ejercito de Afganistán avanza…en parada.
En
Afganistán no existen verdaderas academias de
oficiales y suboficiales. En su Ejército se prospera adaptándose a
los mandos inmediatos. Los sueldos de las tropas son esquilmados por
sus superiores. Allí su corta paga y su rol como militar uniformado
es un signo de prosperidad y poder social entre sus allegados de los
clanes.
Los
jefes, oficiales y suboficiales carecen de de una “moral
nacional”, que les impulse a la defensa cabal de
Afganistán, contra la peste negra de los
Talibán. No existe un honor profesional, un “espíritu
de cuerpo”, que los galvanice con sus compañeros de unidad
en un afán de victoria.
En
fin, no hay en toda la administración un comportamiento ejemplar,
honorable, sufrido (paradójicamente, aunque la miseria se enseñorea
del país) por parte de los jefes superiores y las autoridades
civiles. Que les impulsen a cumplir con todos sus deberes
profesionales y sociales para con sus compatriotas lejanos o para con
el Afganistán demócrata. Que hoy es la cáscara de
una estructura socio política vacía, agostada y estéril.
La
campaña civil, ideológica y militar contra las bandas.
Aquí
el enemigo es elusivo, disperso, peor armado que los militares, mal
entrenado, indisciplinado. Pero es nativo, es resistente y parco, se
esconde y camufla con facilidad, es un depredador nato dotado de una
astucia atávica, no defiende generalmente sus posiciones. Las usa
para desgastar al enemigo regular y pensando en abandonarlas al menor
peligro percibido; en forma de flanqueo, ataque deliberado frontal o
en la retaguardia. Las operaciones de las unidades y grandes unidades
militares dejan escapar por infinidad de “intersticios”
tácticos a los grupúsculos guerrilleros, en los que se
puede dividir una unidad rebelde acosada. Es necesario actuar a su
nivel socio militar: micro táctico y con cercanía. Al
“enjambre” difuso, tenue, pero omnipresente de los
talibanes es necesario interponer un “enjambre”
cívico militar. Formado por militares profesionales y entrenados y
elementos civiles voluntarios, más capacitados que los guerrilleros.
Es
necesario crear pequeñas “unidades de acción”,
para actuaciones “socio militares” combinadas. Que
sean capaces de alcanzar el habitat de los talibanes y expulsarlos de
él, progresiva y firmemente. Interponiéndose entre ellos y las
tribus, el habitat real de los terroristas y rebeldes.
Unidades que, en su modelo básico o standard, estarían formadas por
un pelotón de fuerzas ligeras locales leales entrenadas, un pelotón
de infantes profesionales foráneos y un grupo de técnicos civiles
de fomento y educación con material adecuado. Su logística y su
apoyo estarán basados en unidades y fuerzas helitransportadas,
controladas centralizadamente desde 2 o 3 bases operativas
regionales. Y complementadas por columnas móviles en vehículos o de
caballería, formando una red de patrullas de apoyo por cada región.
Una
vez asentadas esas pequeñas unidades flexibles, pueden acudir
fuerzas mayores y brigadas de trabajo y de enseñanza, para ir
guarnicionando la zona y para impulsar su mejora social. Hace falta
contar con dinero para comprar la voluntad de colaboradores y
simpatizantes. Esto puede hacerse facilitándoles trabajo y
distinción social. Y para realizar los planes de desarrollo
necesarios.
Erradicar
los cultivos de opio puede ser un fin estratégico en sí mismo para
los militares occidentales. Pero, hay que valorar muy bien su
oportunidad y posibilidad en cada pequeña zona. Hay que ofrecer a
los nativos una alternativa de paz, progreso y bienestar, dentro de
sus creencias y maneras, para que segreguen a los talibanes. Que son
realmente para los pashtunes, unos mercenarios de la guerra y unos
explotadores de los civiles, clanes y tribus; ajenos aL Islam popular
profesado por las tribus pastunes.
Conclusión.
Los valores democráticos liberales, que se suponen que son los que sostendrán al gobierno legal de Kabul, son “convicciones ideológicas republicanas”. Que no se sienten, ni se viven por casi nadie en Afganistán. Que son extraños al pueblo afgano, al que no le aportan ni prosperidad, ni seguridad, ni más identidad deseable.
Montesquieu insistió en que los valores democráticos debían transmitirse con el ejemplo. Para que no quedasen en meros mensajes.
Los estadounidenses y sus aliados locales han levantado y superpuesto un “edificio administrativo y político centralizado” sobre la arena identitaria y social de Afganistán. Y que al primer golpe de un contratiempo económico o social serio o del ariete militar Talibán, comenzará a desnivelarse, a resquebrajarse y a hundirse a la vista de todos.
Hasta siete veces se dijo que los Talibanes estaban derrotados
En
las últimas semanas, los Talibanes están llevando a cabo una
ocupación de puestos fronterizos en el norte de
Afganistán y están realizando un cerco parcial, suelto,
de algunas de las poblaciones mayores del país. Lo que les permite
amedrentar a las fuerzas armadas afganas y enviar un
mensaje de decisión y poderío hacia dentro y fuera
del país.
En
general, los analistas internacionales son pesimistas en cuanto a la
capacidad del gobierno de Kabul y, más importante ahora, de sus
militares, para resistir una embestida decidida y preparada,
una creciente,
de los Talibanes. Para tomar el poder político y social en
Afganistán. La discrepancia entre esos analistas sólo
está
en cuándo lanzarán los Talibanes esa Creciente
Imparable.
Modernos métodos de impregnación y motivación de los hombres.
Muchas empresas modernas en los grandes países occidentales reclutaron o recibieron en sus plantillas a numerosos jefes y oficiales, al finalizar las guerras del siglo XX. Y algunos piensan que éstos imprimieron en las culturas empresariales un estilo cuartelero, de dirección desde arriba, sin un feedback moderador. Que implícitamente fueel que facilitó una llamada cultura de la muerte (sic). Para que el pueblo alistado hiciera cosas en contra de su naturaleza. Como matar, sin sentir la emoción turbadora. Una consultora de Blanchard International sugiere exactamente esto en su libro “Por qué motivar a las personas no funciona”. Pero, creo que está errada. Que sus postulados son un mix de pensamientos liberaloides, simplificaciones sicológicas y prejuicios antimilitaristas. Y que no conoce bien el horizonte “ideológico” de las grandes corporaciones capitalistas modernas.
La “teoría gerencial militar” de la consultora quedó cuajada y luego anclada en el siglo XVIII, en la época de Federico el Grande. Aquí, donde la precisión y la rapidez mecánica de las técnicas (carga y disparo de los mosquetes) y de las maniobras, necesarias para aplicar una fuerza de choque potente lo más rápidamente posible sobre el enemigo, exigieron de los hombres una obediencia ciega. Junto con una gran disciplina y un entrenamiento de repetición casi extenuante, para conseguir consistentemente sus efectos. Y, así, la autora no ha tenido en cuenta la evolución de la guerra en la era Contemporánea.
UNA ESCUADRA DE HOMBRES ALISTADOS
Consultoras del prestigio de Mc Kinsey preconizaban desde hace más de dos décadas, la necesidad de crear “competencias” internas entre las distintas áreas o ramas de negocios de una compañía de gran tamaño. Pensando que, de esa competencia de la “dialéctica de los émulos”, surgirían beneficios para la empresa y acicates y motivaciones para las áreas de la compañía y los empleados. Pero, este “proceso social” es más propiodel materialismo científico, basándose en las evidencias del materialismo histórico. Y, en la práctica, la intensidad de esa competencia asciende a los extremos, porque en esa teoría no se le ponen limites o frenos a la dialéctica que se emplee.Salvo el implícito de la buena educación, que permite decir muchas y duras cosas con buenas maneras. Los inevitables pequeños errores e imperfecciones que surgían en las actuaciones y ejecuciones de todos, eran magnificados y empleados por sus émulos para justificar los suyos y sobrevalorar la eficacia de sus propios actos.Y, en vez de usar un sistema operativo de “armas combinadas” (departamentos y funciones integradas en colaboración) a emplear convergentemente sobre el centro de gravedad, por seguir un símil militar, creaban los consejeros un gran tiro de caballos, donde cada animal seguía su dirección indvidual. Consiguiendo así estorbar y trabar el trabajo de las empresas “asesoradas”. Los desgarros internos en las compañías, provocados entre los que deberían ser compañeros en la cultura y la realización cabal de la empresa, fueron el principal resultado duradero de esta práctica autodestructora. Ya que, a diferencia de los hechos del materialismo histórico, aquí no quedaban “vencedores” y “vencidos excluídos”.
Otras veces, como parte de esa “cultura empresarial capitalista”, los consultores externos de firmas de reconocida solvencia, como Arthur Andersen, liquidada durante la crisis de Lehman Brothers, víctima de sus propias contradicciones internas y prácticas heterodoxas, eran empleados por la alta gerencia de las firmas para adelgazar sus plantillas estables y entrenadas. La contratación implícita la solía hacer el CDE (consejero delegado ejecutivo) en un contacto “casual” (promovido por un alto comercial de la consultora), durante un ágape o una reunión de alto «standing», mejor nivel empresarial social. Los sesudos asesores que buceaban a sus anchas por la empresa, facilitaban finalmente el preceptivo informe a la gerencia de la firma. Que lo utilizaba para apoyar el despido o el traslado de empleados, ante éstos y los sindicatos. La premisa básica era que el coste fijo (de personal) era maligno “per se” y debía ser sustituído por el coste variable, en función de la actividad o las ventas de las empresas. Como corolario y consecuencia natural, se trasladaban fuera de la empresa casi toda clase de funciones desempeñadas hasta entonces. Y se entregaban para desempeñarlas a empresas de servicios o de outsourcing, mejor deslocalización. Pero que no siempre tenían ni los medios, ni el personal cualificado que tenía la empresa desmembrada. El grado del outsourcing o deslocalización de empleados y funciones que sufría la empresa original era función del ahorro de costes deseado por la gerencia y pactado con la firma de consultores internacional.
EL JOVEN GEORGE PATTON
Se pueden efectivamente deslocalizar casi siempre los trabajos de mantenimiento y de limpieza; la conserjería y la seguridad; el transporte de reparto al cliente y el de transporte de larga distancia a cargas completas, etc.Pero no se puden ceder a terceros las actividades esenciales de una empresa, ni las que la debiliten en sus funciones estratégicas y el organigrama. Y es necesario, además, tener los medios propios para observar (monitoring) y controlar perfectamente el cumplimiento de sus obligaciones, por parte de los terceros colaboradores. El servicio a los clientes, en cuanto a su satisfacción en tiempo, lugar, cantidad y calidad de lo recibido, es una actividad estratégica. Que es fácilmente maltratada por una entrega a terceros de las funciones relacionadas con ellos (recepción de pedidos, tiempo de servicio o entrega, etc.) En la práctica, se había creado una “cultura empresarial” para la deslocalización. Pero no se establecían los medios y las funciones necesarias para su vigilancia y control. Que podían tomarse de las partes literalmente arrancadas a las empresas, para ahorrar costes fijos…
Las armas son una profesión especial, muchas veces olvidada por las sociedades modernas o, al menos, descuidada. Sobre todo cuando la “oportunidad” de su empleo no se vislumbra en un futuro inmediato. No se puede regir esta Institución por los parámetros de competencia y tensión internas, downsizing y outsourcing de funciones secundarias (por ejemplo, cocina, limpieza, lavandería y seguridad de acceso), gestión empresarial y dirección por objetivos, característicos de las grandes y medianas corporaciones modernas. Esto lo intentó el portento (alto CI) de Robert McNamara, expresidente de la Ford Motor Company, como secretario de Defensa de JFK, en su reforma de 1960. El resultado se vio unos años después, en plena guerra de Vietnam. Muchas unidades de combate no pudieron confiar en sus jefes natos y bajo el fuego enemigo, colapsaron literalmente y se negaron a luchar. Esta putrefacción institucional llevó a que al menos 1000 oficiales y suboficiales de pequeñas unidades fueran asesinados por sus hombres. Aunque la cifra real podría ser mayor. El número de oficiales muertos en Vietnam fue del orden de los 4500. La historia militar moderna no ofrece otro ejemplo de esta magnitud y trascendencia.
La Motivación de los Hombres en Armas.
No es fácil, por no decir que es casi imposible, crear unas fuerzas armadas eficaces y motivadas en una nación débil, fracturada, sin autoestima, derrotada a sí misma por dentro. Porque las fuerzas armadas no son más que la parte de la nación especializada en su defensa activa. Y las integran civiles o nacionales de uniforme. Y, así, no se puede defender lo que no se conoce, no existe o se percibe como no merecedora de la entrega y del esfuerzo propios.
Por eso, lo primero es cultivar y reforzar los vínculos internos de la nación. Que están asentados siempre en sus virtudes idiosincráticas. Es decir, sus valores constitutivos, distintivos y permanentes. Para los pastunes, divididos artificialmente por la línea Durand, establecida por los británicos colonialistas, entre Afganistán y Pakistán, muchos de estas virtudes están recogidas en su Pashtunwalli o código de honor. Para muchas tribus africanas, su assabiya o identidad refleja sus valores esenciales y los mutuos deberes y derechos entre el individuo y su colectividad inmediata o grupo social.
La existencia de una amenaza a la nación, a su integridad territorial o social, a su pervivencia , permite acelerar esos procesos internos de vertebración y galvanización de una sociedad. Creando, como consecuencia, una defensa natural y recia.
Los soldados en general deben ser partícipes, en cierta forma, de sus destinos. Pero, no se trata de crear un “ejército popular”. Donde el criterio de los “conjuntos amorfos” de los soldados, sustituya la sabiduría militar de los mandos y la guía de la doctrina y los reglamentos. Donde, en la práctica, es la “guía” del comisario político de la unidad la que dictaba las normas y su aplicación. Cuyos ejemplos y antecedentes fueron aciagos en las llamadas “democracias populares”. Los comunistas tuvieron que volver rápidamente a la estrcutura del mando único para las unidades militares, si querían recuperar eficacia. Y el comisario político, dependiente directo del Comisariado General Político de las Fuerzas Armadas, fue entonces denominado el sustituto del jefe de la unidad para el trabajo político, dependiendo jerárquicamente de él.
Pero, los soldados participan sintiéndose atendidos, entrenados, equipados, mandados y comprometidos con sus misiones. Sintiéndose integrados en los hechos y su destino. Formando parte de una maquinaria bien diseñada (doctrina clara, eficaz y moderna), que es bien conducida (mandos comprometidos, eficaces, humanos y respetables) y construida: dotada de los medios humanos y materiales adecuados a las misiones a cumplir; aunque su escasez puntual y relativa suele ser crónica.
En general, los ejércitos victoriosos y/o resistentes en todas las épocas han contado con un cuerpo de oficiales y mandos formado y corto, de no más del 7 o el 8% de los efectivos. Con unos hombres entrenados, capacitados y motivados animicamente con razones religiosas, étnicas o sociales. Y dotados todos de un común “espíritu de cuerpo”, de pertenencia a un grupo social selecto y apreciado por la nación. El cual les da entereza, cohesión, espíritu de sacrificio y obediencia al deber, transmitido por sus mandos. Que está por encima, a veces, de las exigencias normales del desempeño de su profesión de las armas. No es cuestión de fanfarrias y soflamas, de desfiles y de “misiones” en los países aliados o deprimidos. Es cuestión de convencimiento, pertenencia, de sano orgullo y disposición de sí mismos, cumpliendo un mandato de la nación.
El
mando gerencial se basa en el manejo de la organización
y de los procesos y tiende a excluir el liderazgo creativo. Se
enfrenta a los problemas en procesos y de un modo sucesivo mediante
métodos establecidos. Practica la política o intercambio de
parcelas de poder y de mutuos favores compensados, en su traslación
al conjunto. Evita la emotividad personal en sus relaciones
institucionales, porque se considera “poco controlable”.
Desarrollo.
La
persona cumple su papel de funciones dentro del organigrama, para lo
cual se le persuade mediante el reconocimiento y los recursos
disponibles. Esto no quiere decir que no existan problemas
personales, sino que se solapan por el juego de estímulos y se
liberan en la frustración personal (como estrés), que es tanto
mayor cuanto menor es el reconocimiento (como elemento subjetivo y de
acción personal) y la capacidad de poder (un factor más objetivo)
de su papel institucional. Mediante ese mecanismo compensador de la
autoestima, se procura que la mayor parte de los intereses personales
exhibidos caigan en el área de indiferencia, dentro de la
institución o de una empresa.
Así,
fuera del rol o puesto, la identidad individual desaparece. Por
ejemplo, a un jubilado, al que se le puede despedir aparentemente con
frialdad, realmente no se le desprecia, sino que nunca se le
identificó personalmente, sino por su rol en el organigrama. Tiene
que existir una conmoción emocional derivada de una tragedia, por
ejemplo, el suicidio repentino de un hijo de un empleado o
colaborador, para que, por una vez, los sentimientos emocionales
personales de todos afloren libremente.
Esta
conducta, además, tiende a cristalizar y a mantenerse por el
carácter perdurable de la institución (Iglesia, fuerzas armadas,
etc.) y por el mecanismo de repetición que se genera al haber dado
“resultado” sucesivamente.
En
el caso de las empresas, más temporales y menos formales, un gerente
nuevo aborda con grandes posibilidades de éxito una empresa con
problemas. Suele existir algún experto con una solución no
considerada, con el que se puede llegar a un acuerdo, mediante la
política. Esto se impulsa por el manejo de los procesos. En estas
situaciones es imprescindible respetar (relativamente) las alianzas y
las parcelas de poder ajenas.
Existe
toda una simbología y una cultura
institucionales, cuya aceptación vincula entre sí a sus
miembros, les define pautas y guías (reglamentos, ordenanzas, código
canónigo, teología moral, misión de la empresa) y su cumplimiento
les preserva o alivia del estrés: se está haciendo lo
debido y como es debido.
De
ahí que sea la desvinculación a la cultura de la institución o
empresa, la idea de que lo que se realiza no es importante (más
subjetiva) o que se ha dejado de efectuar (inicio de vacaciones,
enfermedades, jubilaciones), lo que dispara el estrés. Esto ocurre
por la suspensión de la vinculación y de la cooperación, como
satisfacciones naturales e imprescindibles del hombre.
Esto
se puede compensar, al menos en parte, con actividades personales, en
las que el sentido de lo que uno hace y hace bien, compense
anímicamente la despersonalización de la empresa y la ausencia de
una misión común asumida por todos. Y que es independiente del
nivel técnico o especializado en el que cooperemos.
Dentro
de la cultura institucional existen muchas veces pensamientos
“deformados”. Suelen ser ideas que con el tiempo y en su
inevitable evolución se vuelven tal. Esto ocurre en otras
colectividades humanas y aún a las personas. Básicamente son pautas
o actitudes no contrastadas suficientemente con su realidad
contemporánea. Puede ser la doctrina
de la guerra anterior,
que nos dio resultado y para la cual tenemos un gran arsenal
fabricado y distribuido; puede ser la aversión o el desagrado de los
altos ejecutivos a determinados avances tecnológicos, como la
informática. Estas fijaciones pueden llegar a llevar al desastre; el
mando que más confianza pone en esa parte de su cultura, como
vehículo principal
que es de ella, es el más alejado de las necesidades de la nueva
realidad y sin sensores adecuados en ella.
En
esto contrastan con los niveles medios y más bajos del mando, que
perciben mejor los fallos y las desviaciones de la realidad y su
evolución.
La
frialdad y la lejanía que se atribuyen a la dirección de
gestión son percepciones negativas que no se corresponden
necesariamente con las realidades personales de los mandos. Las
formas de gestión, su expresión práctica, son diferentes y no se
puede pedir a la institución que actúe como la parroquia o el
fraile.
Por
ejemplo, a veces se achaca a la curia vaticana la falta de
sensibilidad hacia determinados problemas humanos. Independientemente
de que en el nivel personal dicha sensibilidad exista y aún esté
mejor informada que en una parroquia del tercer mundo, la misión de
la curia es la gestión de la iglesia como institución
ideológica. Cuidando de la ortodoxia religiosa (una religión
no puede mercadear con su credo o deja de serlo o, al menos, pierde
credibilidad) y de la administración de una sociedad con más de
1.000 millones de afiliados. Esto solamente se puede hacer con
procedimientos de gestión, independientemente de la
santidad, que siempre es un esfuerzo hacia y un encuentro personal
con Dios, de sus miembros.
Flujograma de Funciones
Los factores operativos que definen la dirección gerencial o institucional son:
Principales P Derivados D
Control Presupuestario P
Dirección por Objetivos P
—————————————
Control de Procesos P Limitación de la Variabilidad D
Saturación de Normas escritas D
Procesos, Operaciones y Funciones totalmente delimitadas PyD
—————————————-
Cultura y Simbología propias P Defensa contra la Tensión D
Autoidentidad convencional D
Papeles identificativos estructurales P
—————————————–
Áreas de Indiferencia D
Despersonalización P Incentivos y Penalizaciones, reactivas D
Casi todas las técnicas, tácticas y operaciones dirigidas a obtener la sorpresa táctica u operativa sobre el enemigo, se pueden considerar benévolamente como al borde de los reglamentos y normas existentes. Que son practicadas en los distintos países y grupos de ellos o alianzas supranacionales.
Entre otras razones, combatir solamente según el “libro” suele ser demasiado conocido y previsible. Además, muchos de los “conocimientos” generales recogidos en ellos son compartidos por bloques y naciones diferentes y aún antagónicos. Y es necesario, respetar los reglamentos y ordenanzas y perseguir el objetivo señalado por el mando, como la meta a conseguir.
Pero la actuación creativa y decisiva debe seguir el que llamamos el “camino de la sorpresa”. Como orientador, brújula, de nuestras decisiones y acciones. Buscando esa oportunidad fugaz y jugosa que surge en el desarrollo de las acciones mutuas entre los rivales armados; esas debilidades enemigas descuidadas o vulnerables en unas condiciones que podemos crear, a cuales más imprevistas e insólitas. Para conseguir nuestras metas con más contundencia, eficacia, elegancia y rapidez. Lográndolo con menos pérdida de tiempo, de hombres y de medios. Recordemos el principio básico y universal de la economía de los medios.
Claro que siguiendo siempre el “libro” se podrán abordar y llevar a buen término las operaciones comunes. Pero, aparte de que el enemigo tenga una doctrina y sus reglamentos esencialmente iguales, la forma de luchar será primero conocida y luego aprendida o dominada. Y, quizás, hasta superada finalmente por el enemigo. Los alemanes triunfantes en el primer período 1939-1941, con el alargamiento de la guerra, permitieron el conocimiento y el aprendizaje de su guerra de armas combinadas por sus enemigos. Que luego los superaron en técnicas, tácticas y operaciones y los llevaron hasta su estruendosa derrota en 1945.
Y esta “guía” es de especial necesidad y querencia en los ejércitos burocratizados y cristalizados. Donde los fallos imprevisibles, no culpables, no son solamente una contingencia a superar por el conjunto. Sino que pueden ser también un arma administrativa o política contra los responsables. Y donde el seguimiento del “libro”y de las órdenes de los superiores al pie de la letra, blindan y protegen a los inferiores de la responsabilidad de sus actos.
Martín Van Creveld decía que ésa era la antesala, antes de la inoperancia y la postración finales, de “las organizaciones militares que no se actualizaban y renovaban”. A Martín Van Creveld lo expulsaron como profesor, hace muchos años, de la Escuela Superior Militar de Israel.
Entonces, los resultados se conseguirán cada vez más a costa del desgaste y la pérdida de hombres, medios y materiales. Tendiendo a triunfar entonces el rival que más capacidad demográfica y económica tenga.
Surge entonces un corolario de esta forma de pensar lo militar. El afán de evitar bajas humanas, extendido a todos los ejércitos modernos de 3ª o 5ª generación, llevará al empleo preventivo, protector y terapeútico del fuego pesado. Buscando que las fuerzas propias no tengan en lo posible que luchar a las distancias cercanas y próximas. A ello se le llama tecnología militar moderna y tiene encantadas a las industrias de armamento nacionales. Esto no es más que la perversión y mixtificación del fuego pesado. Cuyas funciones o tareas, en orden creciente de acción y eficacia, son: cegar, perturbar, neutralizar o cubrir y destruiral enemigo en las distintas situaciones de lucha. Y la acción sobre el objetivo tenderá a la destrucción física, como garantía de la seguridad de los hombres. En las actuales guerras civiles y sus complicaciones en Irak y Siria, tenemos los ejemplos en los bombardeos exagerados y metódicos sobre los enemigos. Armados o civiles; reales o sospechosos.
La Sorpresa militar, buscandola conmoción y ladislocación del enemigo.
Durante sus operaciones, el despliegue enemigo se va conformando en la dirección y con la intención que él ha decidido y determinado, para sus medios militares escalonados y para sus vías logísticas. Así, va mostrando sus “cartas” a su rival, en función de su ritmo de actuación y se va empeñando en función de aquéllas.
Nuestra sorpresa puede crear “per se” un nuevo “flanco expuesto”, otra “vulnerabilidad” más o menos crítica en el enemigo. Que él no consideraba aún, que él no esperaba, ni estaba preparado para defenderla con alguna de las formas de lucha. Que son el ataque y la defensa, en sus variedades y combinaciones.
La sorpresa nuestra «penetra» en el despliegue enemigo, buscando conmocionarlo y dislocarlo funcional o posicionalmente. Y, al menos, causarle bajas, ocupar posiciones ventajosas para nuestro desarrollo operativo, disminuir su tempo o ritmo operativo y confundirlo, demorarlo y perturbarlo en sus planes y despliegues. Empleando para ello, por nuestra parte, el mínimo gasto de medios y buscando lograr el máximo efecto posible sobre el enemigo. Con lo cual optimizamos el esfuerzo de nuestras acciones, siguiendo el principio general de la economía de los medios disponibles.
Cuando el enemigo reacciona para contrarrestar y superar el efecto de nuestra acción sorpresiva, se va adaptando necesariamente a nuestra intención. Y, si aquél es grave, se aleja más o menos de sus intereses y planes. Con sus movimientos reactivos para el rechazo y el ataque a nuestras fuerzas, el enemigo va desatendiendo su intención y su misión. En relación a éstas, el enemigo queda alejado de ellas y desequilibrado. Así, una sorpresa concebida, planeada y realizada debidamente nos puede “preparar” al enemigo. Para enfrentarse en desventaja, con menos recursos disponibles y un peor despliegue, a nuestra acción ofensiva principal. Que sería ya más directa, masiva y ortodoxa.
De tal manera que existen toda una gama de efectos posibles a conseguir sobre el enemigo con nuestras acciones sorpresivas. Que variarán también según los medios destinados a obtener nuestra sorpresa, la concepción, la preparación y la realización de la misma y el tiempo disponible, considerando también el conjunto de nuestras operaciones.